Una artista ucraniana realizó un retrato del presidente ruso Vladimir Putin con 5.000 balas recuperadas en el este de Ucrania, donde un sangriento conflicto enfrenta a los separatistas prorrusos con las fuerzas armadas de Kiev.
La imagen muestra al mandatario vestido con un traje negro, y mirando fijamente al espectador. La pieza, de dos metros de altura, domina el taller de Daria Martchenko, de 33 años, la creadora de este retrato llamado «La cara de la guerra».
En el centro del pequeño departamento de la artista están las cajas de madera con los cartuchos de bala. «Al principio tenía un poco de miedo de dormir en el mismo cuarto con él» cuenta la artista. «Pero ya me acostumbré».
«A veces puede parecerse a esos modelos de los carteles de la propaganda soviética o a veces se puede ser Superman», asegura la artista, y añade: «cuando la gente ve cambiar su expresión, eso revela ciertas cosas. En mi opinión esta guerra es diferente de las otras porque está basada en mentiras».
Cada uno de los 5.000 cartuchos que forman parte del retrato fueron recuperados en el este de Ucrania, explica.
Los primeros cartuchos se los trajo su novio, muy comprometido en el movimiento popular Maidán, que llevo a la destitución del presidente ucraniano prorruso Viktor Yanukovich en febrero de 2014.
Algunos amigos suyos que combaten a los prorrusos en el este de Ucrania le entregaron los demás proyectiles. Esas balas, disparadas tanto por soldados ucranianos como por separatistas, son el «símbolo de una vida interrumpida», afirma la creadora del retrato.
En 15 meses, el conflicto ha dejado más de 6.800 muertos, principalmente civiles. Kiev y los occidentales acusan a Rusia de apoyar económica y militarmente a los rebeldes, lo que Moscú desmiente.
«Desgraciadamente la guerra me da mucho material para trabajar» señala Martchenko, y explica que el retrato del presidente ruso será completado con otras cuatro obras de arte.
Esas piezas, dedicadas en «corazón y espíritu» a la guerra, también tendrán armas o elementos provenientes del frente. Una de las obras se llamará «Las cabezas pensantes detrás de la guerra», revela la ucraniana.
«Quizás soy un poco ingenua pero espero que de verdad que él se pregunte si es así como quiere ser recordado», concluye Martchenko.
DC | AFP