Las familias de los dos adolescentes de Florida desaparecidos desde el pasado 24 de julio cuando salieron en una excursión de pesca en aguas del Atlántico, anunciaron el domingo que suspendieron la búsqueda de los menores.
En un comunicado conjunto, las familias de Perry Cohen y Austin Stephanos, ambos de 14 años, anunciaron que decidieron suspender la búsqueda ayer al anochecer, tras “afrontar la dura realidad de no tener noticias, evidencia creíble o pistas para continuar la búsqueda”.
Los jóvenes desaparecieron cuando salieron en una excursión de pesca a bordo de una embarcación de 19 pies (5.7 metros) de eslora desde las costas de la localidad de Júpiter, en el condado de Palm Beach (sur de Florida).
Desde que se reportó su desaparición, la Guardia Costera se enfrascó en una operación de búsqueda y rescate de los adolescentes que implicó el rastreo de unas 50,000 millas y se extendió hasta el sur del estado de Carolina del Norte, sin éxito.
Dos días después de la desaparición de los jóvenes, el bote fue hallado por la Guardia Costera sin sus ocupantes, volcado a 67 millas de la costa de Daytona Beach, en el este del estado de Florida.
No obstante, cuando una compañía de rescate de embarcaciones contactada por la Comisión para la Conservación de la Pesca y Fauna de Florida acudió para su remolque no halló ningún rastro de la barca, la cual hasta el momento figura como desaparecida.
Una semana después de que fueran reportados desaparecidos, la Guardia Costera anunció que suspendía la búsqueda, aunque la familia mantuvo por su cuenta las labores de rescate con el apoyo de donaciones privadas que llegaron a sumar casi medio millón de dólares.
En los últimos días, familiares y varios voluntarios mantuvieron el operativo a través de avionetas y embarcaciones privadas alquiladas, y días atrás anunciaron el hallazgo de dos salvavidas que se presumía podían pertenecer a los adolescentes.
“Amamos a nuestros niños y los queremos en casa. Hoy día, nuestras esperanzas se convierten en rezos para que un día Perry y Austin retornen con nosotros. Agradecemos a todos por su dedicado esfuerzo y apoyo”, manifestaron las familias en el comunicado.
Los dos jóvenes, residentes de la localidad de Tequesta (Florida), se dirigían hacia aguas de las Bahamas para realizar una excursión de pesca, aunque sus padres solo les habían autorizado a mantenerse en el área de la ensenada de Júpiter.