Kya, es una leona del zoológico de Oregón, que haciendo caso a su instinto intento por todos los medios comerse a un niño que estaba vestido con un suéter a rayas blancas y negras que lo hacían ver como un cebra.
Kya, no pudo cumplir su cometido, gracias a una gruesa pared de vidrio que separa su habitad de los visitantes al zoo.
“Este fue el primer viaje de Jack al zoológico. Ni siquiera nos habíamos dado cuenta de que se veía como una cebra hasta que llegamos a casa, pero muchos de los animales del zoológico si lo hicieron – como los cocodrilos y los jaguares. Ellos se acercaban al cristal a mirarlo”, explica la madre del niño Heather Baltzor.
Los trabajadores del zoológico explican que a los leones siempre les llaman la atención los niños y que es muy común ver este tipo de imágenes. Además argumentan que la barrera de protección es totalmente segura.
Los padres del niño aseguran que siempre estuvieron muy tranquilos e incluso incentivaron al pequeño a decirle hola al “gatito”.
DC\IN