El inspector del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), Ernesto Ramón Hernández, de 46 años, fue tiroteado por delincuentes que entraron a su vivienda en el sector La Cancha, de El Limón, a un lado de la autopista Caracas-La Guaira.
El funcionario laboraba como escolta y a las 8:00 de la noche del miércoles llegó a su residencia luego de prestar sus servicios a un militar. Luego de cenar, tres hombres forzaron la puerta principal y Hernández los enfrentó, contó Vilma Hernández, hermana del fallecido.
Al parecer, según dice, su hermano abatió a dos de los delincuentes, pero fue herido en el intercambio de disparos y murió en el sitio. Le robaron la pistola, una computadora y su teléfono inteligente.
Estaba divorciado y vivía solo. Sus compañeros de trabajo lo llamaron vía telefónica cuando no se presentó a su comando, pero nunca atendió. Llegaron a la casa y lo encontraron sin vida. Era padre de tres hijos con edades entre 26 y 22 años.
Su familiar acotó que no es la primera vez en la que el escolta era víctima del hampa. Hace cinco meses fue herido de bala cerca de la Clínica Ávila, en el municipio Chacao, cuando cuidaba a un empresario.
DC/EP