El gobierno de Estados Unidos dijo que la decisión de China de poner fin a la política del hijo único es un «paso positivo» y agregó que espera que algún día ese país elimine por completo los límites por pareja.
«Estados Unidos sigue oponiéndose en todo el mundo a políticas coercitivas de limitación de la natalidad, incluidas prácticas como el aborto forzado y la esterilización», aseguró el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.
También resaltó que la eliminación de límites a la natalidad es algo directamente relacionado con los derechos humanos universales.
El Partido Comunista de China puso un simbólico punto final a 35 años a la política del hijo único al anunciar que todas las parejas podrán tener dos hijos, un cambio con el que busca frenar el envejecimiento de su población.
En un comunicado de su Comité Central, reunido durante los últimos cuatro días para decidir la planificación económica y social del lustro 2016-2020, el partido anunció que «todas las parejas» del país podrán tener dos hijos, una histórica decisión que sucede a medidas de relajación ya puestas en marcha en 2013.
DC/GDA