Globos de colores, serpentinas, un ponqué de cumpleaños y una enorme tarjeta con un letrero que dice “Te amamos” es la forma en la que sus familiares le celebran el cumpleaños número 24 a Andrés Felipe Pérez, el soldado secuestrado por el ELN en Boyacá, tras la masacre de 12 uniformados perpetrada el pasado lunes en Güicán.
Dulfary Giraldo, la mamá de Andrés Felipe, dijo que pese a la dolorosa situación por la que atraviesan se decidió homenajearlo en este día y por eso la decoración en la casa de una de sus tías en Riofrío, Valle del Cauca. (Lea: ‘En nombre de Dios, se los suplico, liberen a Andrés’)
“Estamos celebrándole, aunque no sea el cumpleaños más feliz. Aunque siempre en esta fecha la pasaba en el área, nosotros los llamábamos y le deseábamos feliz día”, dijo Dulfary.
Pérez fue secuestrado junto con el también soldado Antonio Rodríguez, oriundo de Casanare. Ambos hacían parte del batallón de Alta Montaña asignado para resguardar la seguridad de las elecciones del pasado domingo en la vereda Báchira del citado municipio boyacense.
La madre del uniformado aseguró que una vez en libertad, le harán de nuevo la celebración pues es como, según dicen, volviera a nacer.
“El día que venga va a ser como si fuese hoy. No importa que no sea el día (…) yo sé que será muy pronto. Yo sé que mi niño está vivo y él se va a dar cuenta de lo mucho que lo amamos y que lo estamos esperando”, señaló.
La última vez que Dulfary habló con Andrés Felipe fue el sábado 17 cuando él le manifestó que se iba para Báchira. En esa comunicación, él le pidió, como siempre, bendiciones antes de salir al área.
«Debo tener fortaleza, Dios me la ha dado, y sé que mi hijo va a regresar pronto», concluyó la mujer.
DC|ET