El ministro del Trabajo, Jesús Martínez, afirmó que han estado reorganizando, automatizando y sensibilizando todo el sistema de inspectorías en el país. “Se han venido ejecutando cambios graduales en las inspectorías del trabajo”, dijo.
Admitió que existen varios nudos críticos vinculados a las respuestas que ofrecen los inspectores ante los problemas.
Ante esta diatriba, Martínez subrayó que “lo único viable es formar al inspector integralmente, con valores y ética del verdadero funcionario y servidor público”.
A juicio del titular de la cartera del Trabajo, las inspectorías deben ser reorganizadas para evitar el burocratismo. “Hemos encontrado que en zonas determinadas existen dos o tres inspectorías, cuando la población laboral es poca”, recalcó el ministro.
La reorganización tiene como misión entregarle a las subinspectorías las verdaderas funciones de atender los reclamos de los trabajadores, ejercer la supervisión de los centros de trabajo asignados y garantizar la protección del fuero, así como la inamovilidad laboral, aunque no puedan emitir providencias administrativas.
Después de la primera fase de reorganización de las inspectorías, “el segundo plan se ha reactivado en todo el país”. Uno de los objetivos de este plan es agilizar todos los requerimientos, solicitudes y quejas de los trabajadores.
DC/ÚN