Tener várices, ¿significa que tendremos úlceras venosas en las piernas?
Por suerte no. Para que esto ocurra deben tener un muy importante reflujo además de otras características. Sin embargo, las venas varicosas se desarrollan y crecen
a lo largo de nuestra vida y es común ver pequeñas varices no tratadas que se vuelven importantes. En estos casos, el riesgo de úlcera u otra complicación es real.
Las “varicosidades” ¿significan que tenemos mala circulación?
Todo depende de en dónde se encuentren. Ubicadas en los muslos, cara lateral externa por ejemplo, son muy banales. Anuncian una debilidad de las paredes venosas pero no afectan en sí al retorno venoso. Si se encuentran alrededor del tobillo nos están hablando de un pobre retorno venoso, es decir de una dificultad del mismo,
lo cual ya está indicando del comienzo de un cuadro que puede ser grave.
¿La “hinchazón” de las piernas es grave?
Sí, sin duda. En primer lugar, hay que distinguir que es el edema. El edema es la hinchazón que deja la marca del dedo (signo de la fovéa) después de aplicar presión con el pulgar. Edema significa que hay líquido en los tejidos.
El edema aparece rápidamente al levantarse y aumenta durante el paso del día y desaparece en la noche con el reposo. La aparición de un verdadero edema es, sin duda, un signo de la insuficiencia venosa.
Las manchas ¿son un signo de gravedad?
Sí, sin duda, aunque esto no es cierto para todas las manchas. Esquemáticamente, son probablemente una indicación de la gravedad de la insuficiencia venosa. Por lo general son de color marrón. Una pierna que se va manchando gradualmente debe alertar al igual que el edema.
¿Es hereditaria?
En realidad hoy podemos decir que está más en relación al tipo de vida que uno lleva que a causas genéticas aunque no deja ésta última de tener su relevancia.