Leopoldo López Gil, padre del preso político Leopoldo López, criticó el poder judicial venezolano y las violaciones a la libertad de expresión en las que incurre el gobierno de Nicolás Maduro.
“No existe democracia real en un país donde se controlan los poderes desde el Ejecutivo o de forma tiránica desde la Asamblea y someten a los ciudadanos a una obediencia a normas que no están contempladas en nuestra constitución, de la cual se burlan continuamente”, dijo López.
El padre del dirigente de Voluntad Popular forma parte del consejo editorial de El Nacional tiene medidas cautelares de prohibición de salida del país, presentación a un tribunal y orden de arresto, luego que el diputado Diosdado Cabello demandara al diario.
Para López Gil, Venezuela “ha retrocedido a un pasado donde la autoridad tiránica se impone sobre los derechos ciudadanos”.
Reconoció que Maduro aún tiene seguidores. “El populismo es una de las enfermedades más serias y graves que sufre la democracia. Las falsas promesas siempre han atraído a los resentidos, a los desesperados y a aquellos que aspiran a que sus problemas se los solucionen otros, sin hacer el esfuerzo necesario de parte propia”, indicó.
Leopoldo López Gil, padre del preso político Leopoldo López, criticó el poder judicial venezolano y las violaciones a la libertad de expresión en las que incurre el gobierno de Nicolás Maduro.
“No existe democracia real en un país donde se controlan los poderes desde el Ejecutivo o de forma tiránica desde la Asamblea y someten a los ciudadanos a una obediencia a normas que no están contempladas en nuestra constitución, de la cual se burlan continuamente”, dijo López.
El padre del dirigente de Voluntad Popular forma parte del consejo editorial de El Nacional tiene medidas cautelares de prohibición de salida del país, presentación a un tribunal y orden de arresto, luego que el diputado Diosdado Cabello demandara al diario.
Para López Gil, Venezuela “ha retrocedido a un pasado donde la autoridad tiránica se impone sobre los derechos ciudadanos”.
Reconoció que Maduro aún tiene seguidores. “El populismo es una de las enfermedades más serias y graves que sufre la democracia. Las falsas promesas siempre han atraído a los resentidos, a los desesperados y a aquellos que aspiran a que sus problemas se los solucionen otros, sin hacer el esfuerzo necesario de parte propia”, indicó.
DC/ABC