La compra de los radares a Italia, pactada dentro de un convenio marco bilateral contó con el aval explícito del hoy presidente Juan Carlos Varela, canciller en 2010, durante la visita del ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi, que refrendó el acuerdo con Ricardo Martinelli.
En la indagatoria de tres días, el exministro de Seguridad José Raúl Mulino, acusado de perjuicio patrimonial por $68 millones, contó a la Fiscal Zuleyka Moore, que ‘todo el gabinete votó unánime mente por la compra de los radares’.
Según el testimonio de Mulino, durante una visita de Berlusconi a los trabajos de ampliación del Canal, Juan Carlos Varela le dijo: ‘ey, JR, los radares están incluidos, no te preocupes’.
En la transcripción de la indagatoria, a la que tuvo acceso La Estrella de Panamá, Mulino relató cómo se había llegado a la compra de los 19 radares a la empresa Selex – filial de Finmeccanica- por $125 millones. Por esta adquisición, el exministro enfrenta investigación penal y está detenido con cargos de peculado.
La compra de los equipos de seguridad se produjo en el marco de un memorandum de entendimiento entre Italia y Panamá en temas de seguridad, firmado por Silvio Berluscono, entonces primer ministro de Italia; y Martinelli. Varela como canciller era parte del equipo que negocio el pacto.
GOBIERNO SE DESVINCULA
En una carta que envió la cancillería el 15 de octubre de 2015, y que reposa en el expediente, se lee que en el memorandum de entendimiento bilateral se establecen varias formas de negociación en el caso de los radares. En este caso, se dio a través de la autoridad competente, es decir, Minseg.
Mulino considera que ésta es un forma ‘solapada’ de decir que la cancillería de Juan Carlos Varela, no tuvo nada ver con esta negociación. ‘Son profusos los documentos que he aportado en los que consta que ellos jugaron un papel preponderante para concretar el memorandum de entendimiento (….) Alguien negoció y concibió todo esto, y ese alguien no soy yo’, dijo Mulino el pasado 26 de octubre, durante la tercera cita con la fiscal Zuleika Moore, a cargo de la Fiscalía Tercera Anticorrupción.
Una de las causas por las cuales Selex hizo negocios con Panamá aparece en el punto cuarto del memorandum de entendimiento que negoció la cancillería y permite al gobierno italiano recomendar a las empresas que harían contratos con las entidades panameñas. Finmecánica es la empresa italiana más importante en temas de seguridad.
GARUZ Y LOS TESTIGOS
Mulino respondió a las preguntas de la fiscal Moore intentando demostrar su inocencia y evitar a toda costa ser detenido. Sin embargo, no lo logró.
En esa búsqueda por salir airoso pidió que se citara a declarar al menos a 35 personas en calidad de testigos. Todas ellas, dijo, darían mejores luces al proceso.
La lista de convocados está encabezada por el gabinete que avaló la firma del controversial contrato con Finmeccanica. Dos de ellos forman parte del actual gobierno; uno es el presidente Juan Carlos Varela, el segundo, Carlos Duboy entonces ministro de vivienda y actual Secretario de Metas.
Como parte del entonces gabinete, Mulino pidió también convocar a Alberto Vallarino, cuyo nombre ha resonado en el escándalo de Cobranzas del Istmo, siendo en ese entonces ministro de Economía y Finanzas y encargado de negociar el financiamiento del contrato con el City Bank de Londres.
En el primer día de indagatoria, el 22 de octubre, la Fiscalía se centró en entender la participación de otra figura, Alejandro Garuz, puente directo de comunicación entre Selex y el Gobierno .
‘El presidente (Ricardo Martinelli) dio instrucciones para que Garuz se encargara de ese tema desde el día uno’, reconoció Mulino luego de reiterados intentos por evitar involucrar en responsabilidades a quien fue su viceministro de seguridad.
Mulino declaró que Garuz y su equipo eran ‘responsables de dar seguimiento a la ejecución y cumplimiento de los términos del contrato y sus anexos con Finmeccanica’.
Sin embargo, también narro que ‘cuando existían problemas en la instalación, se me informaba, citaba a mi despacho a los representantes de Selex y al embajador de Italia en Panamá para resolver las situaciones’.
En sus declaraciones, Mulino deja en evidencia las responsabilidades de los altos dirigentes del Servicio Nacional Aeronaval (Senan) para elmanejo técnico de los radares comprados para combatir el narcotráfico.
Garuz debía coordinar con el Senan la ejecución del proyecto de los radares, detalló Mulino.
Con información de A. Coriat, M. Testa e I. Cedeño .
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