La marihuana legal para usos recreativos está ganando terreno a pasos de gigante en Estados Unidos, donde ya son cuatro estados los que la permiten, y donde se inaugurará el primer complejo vacacional dedicado exclusivamente al cannabis.
Desde que los votantes de Colorado y el estado de Washington aprobaron la legalización del cannabis recreativo en noviembre de 2012, las encuestas de opinión revelan que la sociedad estadounidense se muestra cada vez más abierta a la regularización de esta sustancia psicotrópica.
El último episodio hacia la normalización de la marihuana recreativa en EE UU lo protagonizó esta semana una reserva india, que anunció su intención de inaugurar por Año Nuevo el primer «resort» del país dedicado exclusivamente a la marihuana. Se trata de la tribu de los Santee Sioux en Dakota del Sur, un grupo de menos de 800 personas pero que ya poseen en los terrenos de la reserva un casino, un hotel de 120 habitaciones y un rancho con más de 240 bisontes.
La idea es que los clientes hospedados en el hotel tengan a su disposición autobuses lanzadera que les llevarán hasta el complejo recreativo, en el que encontrarán diez pistas de bowling, máquinas de juegos «arcade», un bar y un restaurante, todo ello en un entorno en el que se podrá adquirir y fumar marihuana sin problema. «Cuando esté completo, este proyecto de desarrollo económico ayudará a crear muchos empleos adicionales y aumentar la estabilidad económica para la tribu y sus miembros», indicó el presidente de la tribu, Anthony Reider.
Dakota del Sur, un estado de fuertes tendencias conservadoras, no se encuentra entre los cuatro que han legalizado el consumo de marihuana recreativa (Colorado, Washington, Oregón y Alaska), pero las reservas indias cuentan en EE.UU. con sus propias leyes, que del mismo modo que facilitan la instalación de casinos, permitirían una instalación de estas características. A eso se le suma el hechop de que el año pasado, el Departamento de Justicia se pronunció específicamente sobre la cuestión, y aseguró que no perseguirá ni interferirá en las operaciones de instalaciones dedicadas a la distribución y cultivo de marihuana que operen en reservas indias.
De momento, van cien confirmados a la inauguración
En menos de una semana desde que se realizó el anuncio, los Santee Sioux aseguran que ya han recibido la confirmación de 100 personas que asistirán a la inauguración del complejo vacacional la noche de Año Nuevo, en la que se servirá alcohol y marihuana a todos los mayores de 21 años y se les permitirá consumirla en público.
Este último aspecto supone una diferencia sustancial respecto a los estados donde se ha legalizado el cannabis recreativo como Washington o Colorado, ya que en esos territorios el consumo está permitido en espacios privados, pero en ningún caso en público.
El «resort» de los Santee Sioux no solo venderá y permitirá fumar en público, sino que también cultivará su propia marihuana, hasta 60 variedades de cannabis «de alta calidad, libres de contaminantes y orgánicos», según explicó el abogado tribal, Seth Pearman.
Los impulsores del complejo proyectan ganar dos millones de dólares anuales, a la vez que el «resort» se convertiría en un revulsivo económico para la tribu, que todavía padece las consecuencias de la crisis económica de 2008. «Hemos decidido que, ante la potencial legalización de la marihuana en Dakota del Sur, es una oportunidad para nosotros adelantarnos un poco al estado y generar algunos ingresos que nos permitan solucionar algunos problemas», indicó Reider.
Aunque podría parecer que, en contra de lo dicho por el presidente de la tribu, la marihuana legal tiene todavía mucho camino por recorrer en uno de los estados más republicanos del país como es Dakota del Sur, los acontecimientos recientes llevan a pensar que eso no tiene porqué ser necesariamente así. Y Alaska, otro estado de fuerte tendencia conservadora y con unas características similares a las de Dakota del Sur (muy extenso y poco poblado) aprobó por referéndum la legalización del cannabis en noviembre del año pasado, convirtiéndose en el primer estado claramente republicano en lograrlo.
El anuncio de la tribu de los Santee Sioux confirma así una tendencia al alza en Estados Unidos, donde la marihuana recreativa se está abriendo paso durante los últimos años respaldada por un apoyo cada vez más significativo de la opinión pública.