Los padres a menudo quieren tener a los niños envueltos en “burbujas de plástico” en un esfuerzos para protegerlos de los golpes y moretones de la vida, sin embargo, los riesgos, tanto grandes como pequeños son imposibles de evitar.
Un niño que toma su primer paso arriesga una caída y un estudiante de tercer grado que levanta la mano en clase tiene el riesgo de dar la respuesta incorrecta. Si nuestros hijos tienen éxito, sentirán orgullo y alegría, de lo contrario sentirán el dolor de la vergüenza o la decepción, de cualquier manera, van a crecer.
La toma de riesgos es esencial para el desarrollo , de acuerdo con Nancy Eppler -Wolff , un psicólogo clínico y co- autor de Criando Niños Quién Soar : Una guía para la sana toma de riesgos en un mundo incierto este, libro de crianza único argumenta que el riesgo tiene un lado positivo .
A través de los desafíos cotidianos, los niños aprenden el placer del éxito y las habilidades de afrontamiento para superar la frustración de fracaso y perseverar.
Debes permitirle tener sus propios errores y trabajar a través de la incomodidad.
«Sabemos por tanto la investigación y mirando a esta generación que ha sido tan sobreprotegida, es sin duda perjudicial «, dice Eppler -Wolff . » Si usted no puede tomar riesgos, el desarrollo va a fallar. Tienes que salir de ese lugar de comodidad y la complacencia”.
Sin embargo, Eppler -Wolff dice que muchos mensajes para padres centran en ayudar a los niños a evitar riesgos no saludables en lugar de fomentar una acción audaz.
El punto es fomentar las oportunidades que permiten a sus hijos levantarse a los desafíos, «Es muy difícil, como padres, tenemos que ser conscientes de los peligros. Tenemos que saber… algunos peligros reales en este mundo loco «, dice ella. «Necesitamos hablar con nuestros cónyuges, nuestros socios, y decir, ‘OK, me siento cómodo de permitir que mi niño tome este riesgo. ‘
Conozca a su hijo
Comienza por evaluar el perfil de riesgo actual de tu hijo. ¿Tienes miedo de ir bajo el agua, o él intenta un frente flip (ir abajo) su primera vez en un trampolín? Si tu hijo es un tomador de riesgos naturales, tu papel podría ser para él frenar y ayudarle a sopesar las consecuencias sin desalentarlo. Si tu hijo es adverso al riesgo, es posible que tengas que ofrecer estímulo adicional o establecer situaciones que pongan a prueba sus límites.
Conócete a ti mismo
¿En qué consiste las vacaciones de tus sueños?, de volar al oeste para una aventura en la montaña, o tienes miedo de volar? ¿Alguna vez has dicho «no » a un ascenso en el trabajo, ya que te podría empujar más allá de su zona de confort, (zona de comodidad), o eres constantemente listo para saludar el próximo reto en la vida? Tómate tu tiempo para la auto- reflexión sobre como tomas los riesgos. De cualquier manera, es muy probable que pase tus actitudes a tus hijos.
Déjalo pasar riesgos
Tu primer instinto como padre es proteger a tu hijo, pero cuando estos, se enfrentan a un riesgo, es importante tener en cuenta su potencial de rentabilidad frente a un peligro real.
¿Cuál es la verdadera probabilidad de que algo malo va a pasar? El peor resultado posible de dejar que su hijo camine a la tienda de la esquina sería secuestro, pero ¿cuáles son las probabilidades de que esto ocurra? Por el contrario, las dos principales causas de muerte entre los niños son los accidentes de tránsito y ahogamiento, sin embargo, pocos de nosotros pensaría que es razonable mantener a nuestros niños fuera de los coches o las piscinas. Si los inconvenientes de una actividad son mayores que sus beneficios, tu puedes decidir que no vale la pena – y luego tienes la obligación de intervenir, pero si lo peor que le puede pasar es una rodilla raspada, es hora de ir más despacio.
«El tratamiento de su hijo con la ansiedad no va a disminuir la probabilidad de que algo va a suceder», dice Eppler-Wolff.
«Es nuestra esperanza y la experiencia que los niños que, en general, tienen más riesgos tienden a tener un tiempo más fácil en la adolescencia «, dice Eppler -Wolff .
La buena noticia es que nunca es demasiado tarde para salir de tu zona confort, incluso si eso significa que, como padre, debas tomar riesgos.
DC/TT