Este viernes 13 de noviembre arrancó oficialmente, como lo estipuló el Consejo nacional Electoral, la campaña electoral del chavismo y la oposición rumbo a las elecciones parlamentarias del seis de diciembre. La Mesa de Unidad democrática tiene la necesidad de convencer al electorado de la necesidad de un cambio urgente para el país, mientras que al chavismo s ele presentó un problema mayor, un “narcoescándalo”, según reseña el diario ABC de España.
Dos parientes directos de Cilia Flores, esposa del presidente Nicolás maduro, están siendo juzgados en Estados Unidos por presunto tráfico de 800 kilos de cocaína. Se trata de Efraín Antonio Campo Flores, también ahijado de Maduro, y de Francisco Flores de Freites. La primera dama es candidata a diputada del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) por el estado de Cojedes.
El diario español reseña que el caso de los sobrinos de la primera dama ha sido silenciado por los medios oficiales, y que solo dos medios con línea editorial autónoma e independiente le han dado cobertura al caso.
Para el chavismo el tiempo se ha detenido. La dirección de campaña del oficialismo, dirigido por el alcalde de Libertador, Jorge Rodríguez, ha inundado la radio y las cadenas de televisión públicas con propaganda vieja del fallecido Hugo Chávez. Están repitiendo las consignas del líder fallecido hace dos años y medio para tratar de captar votos de los seguidores nostálgicos.
DC|ABC