Las candidatas a las elecciones parlamentarias por la Mesa de la Unidad Democrática, Gaby Arellano (montaña) y Laidy Gómez (frontera), denunciaron presuntas amenazas a potenciales votantes y desigualdad de condiciones en municipios donde hay estado de excepción para realizar activismo político.
Arellano indicó que tanto activistas del Psuv como funcionarios de la gobernación del Táchira aseguraban en sus eventos que sabían por quién votarían las personas al tiempo que hacían advertencias a aquellos que habían obtenido alguna ayuda gubernamental.
“Amenazando a quienes recibieron un beneficio de la misión Vivienda o beneficio médico y decirles que si no votan por los candidatos del Psuv, van a perder la propiedad de la casa o el beneficio recibido. Esa campaña en vez de motivar a la participación, al respeto, al resguardo electoral, están buscando la intimidación y coartar el derecho a decidir que tiene el pueblo del Táchira”, dijo Arellano.
Laidy Gómez indicó que en el circuito de la frontera, integrado por municipios donde hay estado de excepción, indicó que los candidatos revolucionarios han podido hacer sus actos “sin la afluencia masiva del pueblo sino la presencia de la nómina gubernamental que ellos amedrentan”. Dijo que los candidatos de la MUD no han tenido que cambiar la estrategia para poder tener contacto con los votantes.
“Intentamos realizar un casa a casa en El Valle de Capacho y al sitio llegaron tres patrullas de la Guardia Nacional y empezaron a rodear el sector. Evidentemente esto generó incomodidad a las personas que estábamos visitando y decidimos seguir con la campaña de organización. El primero que vulneró el estado de excepción es el gobernador Vielma Mora cuando realizó un acto público en la Plaza La Confraternidad y en la Plaza Miranda de San Antonio hicieron un acto político abierto”, dijo Gómez quien indicó que después de esta última actividad, su pancarta fue rota por los militantes del Psuv.
DC/EN