El presidente de Bolivia, Evo Morales, realizó un polémico comentario a su ministra de Salud, Ariana Campero, mientras daba un discurso sobre la planificación para la construcción de hospitales en la región amazónica de Beni.
El mandatario se percató de que la secretaria de Estado no estaba escuchando atentamente lo que él decía, por lo cual decidió llamarle la atención.
El jefe de Estado suele llamar la atención a autoridades y dirigentes que hablan por teléfono celular o conversan entre ellos mientras él pronuncia un discurso.
Campero, de 28 años, es la ministra más joven del gabinete de Morales y ya ha sido antes blanco de bromas por parte de algunos de sus compañeros del Ejecutivo.
Hace dos semanas, el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, también le hizo una broma durante un acto público.
«Primero cásate ministra, no es así no más, el novio pide ‘pruebita de amor’, pero es primero poniendo el matrimonio, luego te va a dejar con tu pruebita de amor colgando», dijo García Linera a Campero.
Opositores, grupos feministas y la prensa han criticado al Presidente en los últimos años porque en algunas ocasiones ha hecho comentarios machistas en sus discursos, por los cuales ha tenido que pedir disculpas.
En febrero pasado, el mandatario se definió como un «feminista, aunque con bromas machistas» y aseguró que cuenta ese tipo de chistes para provocar reacciones en la derecha, para que la oposición ‘se divierta’ haciendo interpelaciones parlamentarias.
DC/EN