José Raúl Mulino, el ministro de ‘hierro’ del gobierno de Ricardo Martinelli, hizo ayer pública una carta en la que cuestionó el manejo que algunos medios de comunicación han dado a su caso.
Desde su encierro preventivo en una celda de la Dirección de Investigación Judicial, en la que hoy cumple nueve días bajo cargos de peculado, el exministro de Seguridad siente que hay un desbalance noticioso que le impide posicionar su causa ante la opinión pública.
‘Aunque no quiera, leo los periódicos. Me da asco cómo uno en particular elabora noticias, mintiendo y confundiendo…’, escribió.
Igualmente, el extitular de Seguridad Pública aseveró que hay un ‘servilismo mediático’ que aclara en las redes sociales.
El exministro añadió que le ha pedido a su familia que prosiga las denuncias, petición que ha sido seguida por su hijo, José Raúl Mulino Cohen, quien ha salido a la palestra para acusar a la fiscal Tercera Anticorrupción, Zuleika Moore, que ordenó la detención preventiva de su padre, el 26 de octubre pasado.
‘Quise defenderme yo mismo, pero mi arresto me lo impide. Le he pedido a mis abogados que no escatimen recurso alguno, ni aquí ni fuera de las fronteras para denunciar la ‘patraña’ contra mí y sus responsables directos y sus manipuladores ocultos bajo el manto transitorio del poder actual’, dijo.
La indagatoria contra el exfuncionario se inició el 22 de octubre en la Fiscalía Tercera Anticorrupción por el delito de peculado y negligente actuación en la instalación de 19 radares comprados a la empresa Selex, filial de la italiana Finmeccanica, por un monto de $125 millones.
En su carta, Mulino deja entrever que no espera ser liberado por el momento: ‘trato de vislumbrar lo que será mi encierro y busco la fuerza necesaria para avanzar sin claudicaciones’.
Aun así, no dejó su peculiar estilo: ‘mientras todo pasa, les digo que estoy fuerte y seguiré fuerte’.
DC|EP