La Real Academia Española ha comenzado el proceso para modificar la definición de “periodista” en el diccionario, aunque aún es pronto para saber los términos exactos de la nueva redacción que se le dará, dado que antes hay que seguir una serie de pasos.
El director de la Academia, Darío Villanueva, informó que la Comisión Delegada del Diccionario estudió la propuesta enviada al respecto por Ramón Salaverría Aliaga, profesor de la Universidad de Navarra, y acordó una nueva redacción del término “periodista”, que no se hace pública porque puede experimentar cambios.
Salaverría se puso en contacto con la RAE dado que, en su opinión, las dos acepciones de “periodista” que figuran en la 23.ª edición del Diccionario están “obsoletas y son imprecisas”.
En la primera de ellas se define esta palabra como “persona legalmente autorizada para ejercer el periodismo”, y en la segunda como “persona profesionalmente dedicada en un periódico o en un medio audiovisual a tareas literarias o gráficas de información o de creación de opinión”.
Según el profesor, la definición se ha quedado obsoleta porque, “en los países democráticos el ejercicio profesional del periodismo no está sujeto a ninguna autorización legal”.
La definición actual de periodista “puede ser aplicada únicamente a los que trabajan en países con gobiernos autoritarios y sin libertad de prensa. Creo, en consecuencia, que mantener la primera acepción resulta, además de anacrónico, improcedente”, destacó Salaverría.
En cuanto a la segunda acepción, sugiere que también se revise, “puesto que no ampara todas las modalidades de periodistas existentes, y deja fuera tanto a quienes lo ejercen en medios de internet como a los periodistas free lance que lo practican de manera autónoma”.
En su respuesta, la Academia se limita a decirle que han estudiado su petición y que “en la próxima edición del DRAE podrá ver reflejada la nueva redacción” acordada por la Comisión Delegada.
La citada comisión estudió esta propuesta y vio que las sugerencias de Salaverría “eran muy dignas de tener en cuenta”, comentó Darío Villanueva.
Han dado, pues, “un primer paso”, pero a partir de ahora la Academia seguirá el proceso habitual en estos casos.
La redacción provisional de periodista, acordada por la Comisión Delegada, tendrá que pasar por el Instituto de Lexicografía de la RAE para estudiar la documentación existente acerca de esa palabra, luego irá también al Pleno académico, antes de ser enviada a todas las Academias americanas.
“Hay que ver si los cambios que se proponen son aceptables o no en América, donde está muy extendida la profesión de periodista”, agregó Villanueva.
Superados esos trámites, se redactaría la definición final de la citada palabra y se incorporaría a la edición digital del Diccionario cuando la RAE lo estime oportuno.
Cada vez que llega una propuesta de ese tipo a la RAE, la Academia estudia también todas las palabras y acepciones conexas, porque el Diccionario “tiene que ser coherente”, afirmó el director
DC/EN