La experiencia y aceptarte como eres, pueden ser claves para lograr un buen sexo con tu pareja. En el sexo, al igual que en la vida en general, hay ciertas cosas que no puedes aprender a través de consejos o de la propia investigación, sino que sólo la experiencia te las demostrará. Prestá atención a lo que aprenderás con el paso de los años y fijate si algunas ya las sabés.
Siempre puede mejorar
Si a los 20 pensabas que estabas en tu mejor momento y que tu sexualidad estaba en la cúspide, te darás cuenta con los años que todavía tienes mucho por mejorar y que la experiencia será tu mejor arma.
El aspecto físico no influye en el placer
Por más que te lo digan puedes no creerlo, pero cuando sumás experiencia por fin lo sabés: no importa que estés maquillada, bien peinada, ni que tu pareja te vea delgada y con los muslos firmes. El aspecto físico no se relaciona con un encuentro sexual positivo. Poco a poco te liberarás de tus propios prejuicios y comenzarás a disfrutar sin pensar tanto en el qué dirán.
El juego previo… ¡sí importa!
Es verdad, siempre lo dicen, pero sólo la experiencia te lo demuestra. Cuando recorrés el camino de la sexualidad entiendes que el juego previo no es sólo el inicio de la relación sexual, sino que es prácticamente equivalente al coito.
Podés pedir por tu placer
Con la experiencia aprendes a no conformarte con lo que hay, sino que te das cuenta que puedés pedir lo que quieres y deseás en la cama de una forma sensual y que no ofende, es más, la sutileza es algo que enloquece a los hombres.
DC|MS