Estos trucos no son tan efectivos como las técnicas de relajación progresiva, pero de seguro te ayudarán cuando no cuentas con suficiente tiempo.
1.- Come avena (tiene propiedades relajantes). Se puede acompañar con fruta y frutos secos.
2.- Mover los labios curvándolos hacia arriba. Sí, eso. Sonreír. Ese gesto que puede parecer intrascendente transmite al cerebro un mensaje similar a: “Todo va bien.”
3.- Antes de dormir, meter los pies en agua caliente durante cinco minutos. Con ello puedes darte un ligero masaje e incorporar al agua esencias de aromaterapia que ayudarán a tus sentidos.
4.- Respirar bien (inhalar-exhalar). Cuando se está apresurado o tenso, se retiene más el aire sin que uno se de cuenta. Eso mismo produce malestar. Al respirar adecuadamente verás como tu cuerpo baja el ritmo y se sentirá mejor. Incluso antes de dormir te puede ayudar a conciliar el sueño más fácilmente.
5.- Agarrar el dedo pulgar de una mano de tal forma que quede envuelto por la otra mano. Duración: de tres a cinco minutos. Después, cambiar de mano. Esta postura calma la ansiedad.
6.- En otro mundo. Toma unos minutos para visualizarte a ti mismo sonriendo, tranquilo y cómodo en un entorno agradable. Esto ayudará a despejar tu mente de los problemas diarios.
DC|EM