Varios grandes parques de atracción de Estados Unidos, entre ellos Disney World, reforzaron el jueves su seguridad con detectores de armas en los puntos de ingreso, en una medida preventiva ante los interrogantes sobre la seguridad en estos lugares.
Además de Disney World, SeaWorld y Universal Studios, que poseen parques de diversiones en Florida y California, adoptaron esta decisión en un contexto de creciente prevención ante los tiroteos frecuentes o la posibilidad de un atentado yihadista.
“Revisamos constantemente nuestras medidas de seguridad y las reforzamos cuando es necesario”, explicó Disney World en un comunicado.
“También hemos puesto termino a la venta en nuestros parques de juguetes que representan armas”, precisó Suzi Brown, portavoz de los parques de diversión del gigante estadounidense de los medios y el entretenimiento.
Los visitantes mayores de 14 años no podrán utilizar disfraces o máscaras, agregó.
“Esperamos que los visitantes se sientan seguros cuando vengan a nuestros parques”, señaló por su parte Tom Shroder, portavoz de Universal.
Algunos turistas se quejaron del uso de los detectores, que señalan hace perder un poco de la magia que rodea a estos parques.
La asociación Brady Campaign, que trabaja por mayores controles a la venta de armas individuales en Estados Unidos, considera que estas medidas de seguridad en los parques de atracciones ilustran la falta de coraje del Congreso, incapaz de tomar medidas para detener la proliferación de armas.
“Miren hasta donde hemos llegado (…) el lobby de las armas en el Congreso prefiere que sean los niños los que se someten a controles en los sitios donde ellos deberían ser los más protegidos” señaló Dan Gross, presidente de la asociación.
Ante la proximidad de la temporada de vacaciones, el presidente Barack Obama aseguró este jueves que el gobierno no posee ninguna información “precisa y creíble” sobre posibles atentados en territorio estadounidense.