“Es posible que estuviera relacionado con el terrorismo, pero aún no lo sabemos. Es posible que estuviera relacionado con el lugar de trabajo” de uno de los autores del tiroteo, dijo Obama en una declaración a la prensa desde el Despacho Oval.
El mandatario declaró que, a partir de ahora, la del tiroteo es “una investigación del FBI” (sigla del Buró Federal de Investigaciones), que cooperará con las autoridades locales para determinar el móvil del ataque.
“En este momento no sabemos todavía por qué ocurrió este terrible suceso”, indicó Obama después de ser informado de los últimos detalles por la fiscal general de EE.UU., Loretta Lynch, y el director del FBI, James B. Comey.
“Sabemos que los dos individuos asesinados (por la Policía) estaban equipados con armas, y parece que tenían acceso a más armamento en sus hogares, pero no sabemos por qué lo hicieron, las dimensiones de sus planes ni sus motivaciones”, añadió.
Los sospechosos fueron identificados este miércoles como Syed Farook, un varón de 28 años y nacionalidad estadounidense, y su esposa Tashfeen Malik, de 27 años y nacida en Pakistán.
Ambos murieron tras una persecución policial con la Policía en la ciudad de Redlands horas después del tiroteo y en el momento de su muerte vestían ropa de asalto y portaban rifles y pistolas.
Obama subrayó que aún tienen que hacerse “entrevistas para entender la naturaleza de las relaciones” de Farook con sus superiores “en su lugar de trabajo”, un centro de ayuda para discapacitados de San Bernardino, donde se produjo el tiroteo.
DC | EFE