El presidente del Gobierno español en funciones, Mariano Rajoy, recibió este lunes el «no» de los partidos emergentes Podemos y Ciudadanos, para alcanzar un pacto y formar un nuevo Ejecutivo.
El presidente prosigue con estos encuentros la ronda de contactos con los principales fuerzas políticas para lograr un acuerdo que permita formar un Ejecutivo tras las elecciones generales del 20 de diciembre, que dieron como resultados un escenario sin mayorías y en el que su partido fue la lista más votada con 123 escaños.
Rajoy recibió la semana pasada el rechazo de los socialistas PSOE (90 diputados), una negativa que hacía casi inviable su reelección como presidente y también que su partido (PP) consiga los apoyos necesarios para formar un nuevo Ejecutivo.
Iglesias anunció antes de la reunión su negativa a apoyar a Rajoy «ni por activa, ni por pasiva» (con apoyo directo o absteniéndose), ya que sus planes para España no son «compatibles con que el PP siga gobernando».
Entre las «líneas rojas» del partido para alcanzar un posible acuerdo de gobierno está incluido un referéndum sobre la independencia de Cataluña, una cuestión que dificulta un posible pacto de formaciones progresistas liderado por el PSOE.
«Quien no entienda que la unidad de España se defiende desde la democracia y quien no entienda la diversidad y la plurinacionalidad del país no ha entendido nada», subrayó Iglesias en clara alusión a la consulta catalana, a la que no renuncia.
El líder de Ciudadanos (40 diputados), Albert Rivera, también transmitió a Rajoy que no apoyará su investidura, aunque aseguró que su partido se abstendría en la votación si el PP logra alcanzar un pacto con algún partido, para poner en marcha la legislatura.
Rivera dejó claro que «la unión de todos los españoles no se negocia» yaseguró que no apoyará ninguna coalición cuya hoja de ruta suponga la ruptura del orden constitucional, señaló en referencia a la propuesta de Podemos.
Por su parte, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, trasladó a ambos líderes que «el mandato democrático» de los resultados de las urnas del 20 de diciembre dictan que sea su figura la que encabece el próximo Ejecutivo.
El PP sacó casi siete puntos y más de treinta escaños a la segunda fuerza política, el PSOE, y fue la lista más votada en 39 de las 52 circunscripciones.
«Esos resultados son la expresión clara e incuestionable de la voluntad de los españoles, que, en lógica democrática debería suponer el mandato para la formación del Gobierno», señaló el Ejecutivo español en un comunicado.
DC|EFE