Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos confirmaron este martes dos nuevos contagios de zika por transmisión sexual e investigan otros doce.
En un comunicado, los CDC anunciaron este martes que dos mujeres con zika solo tuvieron como factor de riesgo el haber mantenido relaciones sexuales con sus parejas, que habían viajado a zonas donde hay transmisión local del virus.
Los CDC aún están pendientes de conocer los resultados de las parejas sexuales de estas mujeres infectadas, además de los de las pruebas de los otros 12 casos que investigan por posible contagio sexual. En Estados Unidos, se habían confirmado hasta ahora otros dos casos de transmisión sexual del zika, el primero en Colorado en 2008 y el segundo en Texas a principios de febrero de este año.
«Como en los casos de transmisión sexual reportados previamente, estos casos implican la posible transmisión del virus por parte de hombres infectados a sus parejas sexuales», explica el CDC en su nota. «Estos nuevos casos sugieren que la transmisión sexual podría ser una manera más probable de transmisión del zika de lo que se había considerado previamente», agrega.
Los CDC aclaran, además, que por el momento no existe ninguna prueba de que las mujeres puedan transmitir el zika a sus parejas sexuales. «No obstante, se necesita seguir investigando para entender este asunto», advierten.
Hasta este martes, se habían documentado dos casos de trasmisión sexual del virus. El primero ocurrió cuando un científico contagió a su mujer en Colorado (EE.UU.) a la vuelta de un viaje de trabajo en Senegal en 2008.
El segundo trascendió hace poco, cuando las autoridades de Dallas (Texas) informaron de que un hombre había contagiado a su pareja tras infectarse del virus por la picadura de un mosquito en otro país.
Además, recientemente los CDC publicaron que un grupo de científicos británicos halló restos del Zika en el semen (no en la sangre ni en la orina) de un hombre británico de 68 años, contagiado a su regreso de las islas Cook en 2014, dos meses después de haberse detectado el contagio.
DC | EFE