La ola de sicariatos no cesa en el municipio Santa Rita, del estado Zulia, en lo que va de mes se han registrado varios hechos en los que pistoleros no han dudado en accionar sus armas de fuego contra su objetivo sin importar la presencia de inocentes en la escena, tal es el caso del último caso en el que sicarios dieron muertes al dueño de una finca y dos de sus empleados dentro de su parcelamiento.
El triple homicidio se registró a las 7:00 de la noche de este domingo, en el sector La Cabuya de la carretera Lara-Zulia, donde se encuentra la finca El Sol. A este lugar llegaron varios sujetos quienes sometieron a los tres hombres, los amarraron de manos y pies, les colocaron bolsas en las cabezas, los golpearon y torturaron con descargas eléctricas en el cuerpo antes de dispararles, todo esto en presencia de la esposa de uno de los trabajadores y dos de sus niñas.
Las víctimas fueron Fernando Manuel Jordan Cardozo, de 46 años, conocido como “Nando” y dueño de la finca, así como los empleados Julio Edixo Álvarez Quero, de 42 años, apodado “El Bachaco” y Graciel José Álvarez Quero, de 25, conocido como “El Virolo”. El trío se encontraba compartiendo tragos tras haber culminados sus labores en el parcelamiento, donde habían terminado de perforar uno pozos artesanales.
Tras asesinar a los tres hombres, los criminales apuntaron a la mujer y las niñas, pero el líder del grupo ordenó dejarlas con vida reseñó La Verdad.
Antes de asesinar a sus víctimas, los delincuentes habían ingresado a una finca vecina donde sometieron a cuatro personas y se llevaron un aire acondicionado, dos bombas de agua, equipos de perforación de pozos, molinos de agua y el dinero correspondiente al pago de los trabajadores por su semana de labores. Los delincuentes huyeron en una camioneta.
Sobre “Nando” se conoció que era técnico superior en Informática, residía en la finca donde fue asesinado, estaba divorciado y dejó dos hijos. Mientras que de los hermanos Álvarez se supo que residían en el sector Matejei Centro, del municipio Miranda, Julio llevaba un mes trabajando en la finca, era casado y dejó cinco hijos en la orfandad, y Graciel trabajaba en una cauchera, había llegado el mismo fin de semana para ayudar a su hermano con los trabajos de la finca, era soltero y no tenía hijos.
DC | Caraota Digital