La dirigente opositora María Corina Machado afirmó este lunes que Nicolás Maduro no renunciará de forma voluntaria a su cargo e instó a dar “una conducción política al clamor popular” que pide la salida del poder del mandatario.
“Es nuestro deber moral darle una conducción política al clamor popular. Ingenuos son quienes dicen que la renuncia de Nicolás Maduro será voluntaria. ¿Lo contrario no sería reconocer la incapacidad para articular movimientos sociales que impulsen esa renuncia? ¿Qué sería de Venezuela si se sigue planteando la destrucción del patrimonio nacional? Ya la soberanía ciudadana se expresó el 6 de diciembre, ya dimos un mandato. Incluso dentro de las filas oficialistas piden la renuncia de Maduro”, expresó Machado durante un foro realizado por la Cátedra Pío Tamayo de la Universidad Central de Venezuela (UCV).
“‘La salida’ era ‘la salida’ y ese era el momento. En ese entonces nos llamaron radicales. Advertimos de la perversión del Consejo Nacional Electoral y la respuesta fue que sembrábamos desconfianza. Cuando hablamos de transición, nos llamaron exagerados. Cuando planteamos la renuncia, nos llamaron ingenuos. Hoy la devastación se mide en vidas humanas”, agregó.
“No hay posibilidad” de que Maduro rectifique
En tal sentido, afirmó que “no hay posibilidad alguna de que Maduro y su régimen rectifiquen, por eso es hora de abordar esta crisis. Nuestra sociedad tiene la oportunidad de vencer sus males históricos, como lo son el militarismo y el populismo. He insistido en la urgencia existencial de un cambio de régimen”.
Asimismo, sostuvo que las intenciones del Gobierno nacional han sido alertadas por su persona “desde el primer día”.
La decisión del Tribunal Supremo de Justicia selló el enfrentamiento de poderes en Venezuela; el decreto que crea una empresa militar petrolera es la confirmación de la tutela militar sobre toda actividad económica; las acciones contra la Polar y todo el sistema productivo; los hechos vinculados al racionamiento eléctrico… Todo eso es asesoría cubana, todas esas cosas exacerban la crisis de gobernabilidad. Nada de lo que hoy nos afecta es casual. Por eso yo he hablado de la ética de la urgencia. La dinámica y el ritmo político deben ir a la par de la demanda social, no al revés”, puntualizó.
DC | Sumarium