Te hablo desde mi edad adulta, desde la serenidad que me da no ser ahora protagonista en el escenario político, si bien sí, un ciudadano preocupado por la situación, y víctima, como todos, del deterioro del país que se nos cae a pedazos. Nicolás, hay un momento para cada cosa, acción o propósito. El Eclesiastés reza: “Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora. Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado”. Es tu tiempo de partir, te explico.
Nicolás, hace poco más de tres años ni tú mismo pensaste en que el poderoso dedo del Comandante Chávez te apuntaría como su sucesor. Yo pensaba y sigo pensando que no era tarea para ti, pero fue tu tiempo; hace tres años llegó tu hora de ser el presidente de Venezuela, y todo conspiró para que así fuera, y así fue, fue tu “tiempo de nacer” como presidente. En tres años has hecho un desastre, lanzaste al país por un barranco. Es verdad que las cosas no venían bien, pero en tus manos el deterioro ha sido tan acelerado que por ti y por el país lo mejor es cortar ya. A tu “tiempo de nacer” como presidente, pronto le llegó su “tiempo de morir”. Lo inteligente y conveniente, para ti y para el país, es no prorrogar más lo que en tus manos no tiene salida.
Estamos a la mitad del período para el cual fuiste “electo”, tú debías completar el sexenio de Chávez que apenas él inició, si es que realmente lo inició y ya no estaba muerto en Cuba, cuando ustedes sostenían que estaba vivo, bajo la sospecha general de que no era así. Pero en todo caso, a mitad de período ya estamos cansados de ti, le están saliendo demasiado caros a la República tus errores y fracasos. Dejarte otros tres años en la presidencia sería una grave irresponsabilidad nuestra, estamos obligados a abrirte una puerta constitucional para que le permitas al país encontrar salida. Pero si solo tu voluntad contase para quedarte tres años más, continuar sería un error para ti mismo, para tu familia y para tu nombre en la historia.
Otras veces lo he escrito, y lo reitero ahora, la renuncia es la salida constitucional más barata, la que genera menos traumas y menos daño al país. Yo diría que estás obligado a abrir esta puerta porque han sido múltiples y graves los daños que le has hecho a la República, a su economía y seguridad, y a la calidad de vida del venezolano. No tienes derecho a ponérnosla más difícil. Renuncia. De no ser así, por supuesto que hay otras salidas constitucionales, para eso está el referendo revocatorio, o una enmienda o reforma constitucional que nos permita recortar el período presidencial, por ejemplo, a cuatro años, o igualmente la convocatoria a una Asamblea Constituyente. Estos son caminos más lentos, costosos desde el punto de vista político y desde el punto de vista económico, lo que cuenta en un país empobrecido y en quiebra. De tu salida debemos ocuparnos todos, incluso tus compañeros de partido, Venezuela requiere un viraje.
“Todos, absolutamente todos, tenemos una responsabilidad política, el apoliticismo en Venezuela, en el momento actual, es una deserción”, así lo expresó Caldera hace 70 años, en su discurso “Ganar la patria: una responsabilidad mancomunada. Sus palabras tienen hoy plena vigencia: “El obrero no encuentra trabajo, no tiene redención ni esperanza, si la organización política está corrompida. El industrial no puede desarrollar sus proyectos, el agricultor, el criador, el comerciante, no pueden encontrar confianza en sus actividades, el profesional no puede lograr el cumplimiento satisfactorio de sus preocupaciones, si existe un orden político alterado, que utiliza los recursos nacionales para el sostenimiento de una camarilla, para el enriquecimiento de los favoritos y para la tergiversación de las obligaciones administrativas”.
Nicolás, salir de ti es tarea de todos, hacerlo más fácil está en tus manos; con tu renuncia ganamos todos, tú el primero. Hay “tiempo de destruir, y tiempo de edificar”. ¿Qué más vamos a destruir si estamos en situación deplorable? Confiemos a la conducción de otro la edificación de un tiempo que soñamos nuevo y mejor.
DC / Paciano Padrón / pacianopadron@gmail.com / @padronpaciano