La cajera de una gasolinera decidió que no sería la víctima pasiva de un robo a mano armada y se enfrentó al ladrón.
El vídeo de vigilancia de la estación de Georgia muestra el momento en que un hombre se dirige al mostrador para pagar la bebida que había comprado.
Mientras la cajera le cobra, el hombre se mueve nerviosamente de un lado a otro, hasta que saca un arma de fuego cuando la empleada abre la caja registradora. Tras decirle algo a la cajera, los dos discuten y la cajera le pega en la mano, tratando de tumbarle la pistola. La mujer le pega varias veces y termina golpeando al asaltante en la cabeza con la gaveta de la registradora.
El delincuente echa a correr, pero la mujer no ha terminado con él y saca un martillo de debajo del mostrador, por si acaso el hombre regresa. El sospechoso escapó y sigue fugitivo.
DC/ENH