El gobernador del venezolano estado Bolívar, Francisco Rangel Gómez, reiteró hoy que, tras varios días de búsqueda, no se ha conseguido “absolutamente ninguna evidencia” de lo ocurrido con el grupo de mineros desaparecidos que, según algunas denuncias, fueron presuntamente masacrados.
“La Fuerza Armada ha ido (con los familiares) a los propios sitios donde ellos han indicado y no han conseguido absolutamente ninguna evidencia hasta este momento”, dijo a la emisora local Unión Radio el gobernador, que añadió que no descarta “que exista un problema”.
Las declaraciones del gobernador se contraponen a las del defensor del Pueblo venezolano, Tareck William Saab, que afirmó hoy que las investigaciones preliminares aportaron “una serie de elementos probatorios que determinan que, efectivamente, se cometieron hechos punibles, al margen de la ley, tipificados como delitos graves en el código penal”.
Rangel Gómez reconoce que están “ante una situación bien compleja, bien difícil”, pero evitó dar un número preciso sobre el número de desaparecidos por considerar que sería “irresponsable”.
El gobernador chavista, que desde el principio tachó de “falsas” las aseveraciones de un grupo de diputados opositores que sostienen que al menos 28 mineros fueron masacrados en una mina de la localidad de Tumeremo, sostuvo que hasta este momento este dato no es cierto.
“Yo desde un principio negué lo que se estaba diciendo. No hemos negado jamás que esté ocurriendo una situación muy complicada”, reiteró.
La tesis que maneja el gobernador es que “hubo un enfrentamiento entre bandas armadas que se han dedicado a tratar de asumir el control de algunos sectores mineros”, sin embargo no precisó como este evento podría estar relacionado con la desaparición de un grupo indeterminado de mineros.
Hasta el momento, dijo Rangel Gómez, “se tienen una cantidad de denuncias por el orden de once personas que están siendo reclamadas por familiares, amigos y que no han aparecido”.
“Nosotros queremos pensar que están desaparecidos, pero pudo haber sucedido algo peor”, añadió.
Las investigaciones se iniciaron el pasado viernes cuando, según relatos de supuestos sobrevivientes difundidos por los diputados opositores por la zona Américo de Grazia y Andrés Velásquez, 28 mineros fueron asesinados a tiros por delincuentes que operan en las minas de oro de la zona y que luego escondieron los cuerpos.
El ministro venezolano de Defensa, general Vladimir Padrino, informó ayer que unos mil soldados buscan a los mineros desaparecidos en “un despliegue extraordinario por aire, por mar, por ríos, por tierra”.
DC | EFE