La banda Scorpions se vio obligada a suspender el concierto que estaba dando en Hamburgo tras sólo 30 minutos porque fallaba la voz del cantante Klaus Meine, quien se subió al escenario a pesar de estar en enfermo.
«Tiene una infección viral que le ha atacado plenamente la voz y se encuentra en tratamiento médico», dijo Peter Lanz, el agente de relaciones públicas del viejo rockero.
Por ahora todavía está en el aire si Scorpions podrá seguir con el concierto previsto para el miércoles en Berlín, programado con motivo de su 50 aniversario de carrera.
Meine dijo que lamentaba profundamente la interrupción del concierto en Hamburgo. Miles de fans mostraron comprensión y, en lugar de los abucheos en las redes sociales muchos expresaron deseos de pronta recuperación para el cantante. El agente señaló que por ahora no se sabe si se podrá recuperar el concierto en Hamburgo.
EFE