Consultamos a dos expertas que sugieren qué se debe comer y hacer para no llegar al extremo de la gordura.
1. No inventes la dieta ni adaptes la de otros a tu rutina de alimentación. Cada organismo responde de manera diferente. Recuerda que hacer dieta no implica dejar de comer sino aprender a comer de manera balanceada.
2. Dieta sin ejercicio no funciona. De nada sirve cuidar lo que comes si no refuerzas con alguna actividad física que te ayude a reducir calorías. El ejercicio te permite quemar rápidamente los kilos de más.
3. Organiza horarios fijos de comidas. Comer a deshoras desestabiliza el organismo y este empieza a funcionar más lento.
4. Fracciona porciones. Para evitar la ansiedad, distribuye tu dieta entre seis y siete comidas al día. De esta manera no sentirás hambre al tiempo que comes justo lo necesario.
5. Come saludable. Evitar incluir harinas refinadas y azúcares en la dieta es una forma segura de no subir de peso.
6. Evita hacer períodos de ayuno muy prolongados. Lo único que se logra es ingerir cantidades más grandes después para compensar el tiempo perdido.
7. No repitas comida. Consumir el doble de la porción no sólo crea mayor ansiedad sino que genera la sensación de insatisfacción en cada comida, por lo que la persona nunca queda satisfecha.
8. Cuando es a comer es a comer. Evita ver televisión, leer el periódico o en el caso de los niños evita el juego a la hora de la comida ya que esto retrasa la digestión y el organismo no elimina las grasas y carbohidratos como es debido.
9. La actividad física es imprescindible para sostener el peso después de haber bajado. El ejercicio debe ser, más que una terapia, una rutina de vida.
10. Un plan de alimentación saludable es vital para evitar la obesidad. Incluir el concepto CESA (completa, equilibrada, suficiente y adecuada).
11. Dietas extremas a lo único que conducen es a que las abandones o a que luego de terminarlas vuelvas rápidamente a tu peso.
12. Procura incrementar el consumo de frutas y verduras a 5 porciones en el día, limitar la grasa saturada, controlar el consumo de azúcar y de sal y consumir tres porciones de harinas en el día.