Un grupo de habitantes del municipio de Floridablanca, en Santander (Colombia), aseguran que en el barrio Zapamanga hay una estatua de una Virgen que llora sangre, según un artículo publicado en el diario británico Daily Mail.
Desde el fin de semana pasado, que se reportó el hecho, cientos de personas han llegado a el pequeño pueblo donde está la imagen de la Virgen.
Ana Cristina Jiménez dijo: “ Vi que la Virgen tenía una lágrima de sangre. Me sorprendió y me dio alegría y tristeza al mismo tiempo”.
Después de limpiar el rostro de la imagen, las mujeres residentes del lugar aseguraron que otra lagrima de sangre brotó de uno de sus ojos el día de ayer.
La iglesia católica no ha comentado nada, pero el arzobispo de la ciudad ha pedido a los feligreses que ser cautos.