Ante la crisis económica que afecta al Hospital de Cabimas Adolfo D’ Empaire por la falta de presupuesto para el mantenimiento del centro médico, la directiva tomó ayer la decisión de cobrar 12 mil bolívares a los propietarios de los kioscos que funcionan dentro y fuera del centro de salud, tras una reunión.
La medida se tomó para garantizar al menos la compra de artículos de limpieza. Solo cuatro de los 15 propietarios de locales comerciales aprobaron la decisión, el resto no se niega a colaborar pero asegura que el monto es elevado.
José García, uno de los afectados, alegó que él y sus colegas también sufren los embates de la crisis económica que golpea al país. «Hay días en que las ventas son muy malas y vendemos poco, no nos pueden exigir ese pago».
En la inmediaciones del hospital hay 15 kioscos operativos, sobre ellos pesa desde ayer la amenaza de cierre en caso de no pagar la multa impuesta por la dirección del Adolfo D’ Empaire. Aseguran que cerrarán ante esa presión.
«Nosotros podemos traerles desinfectante o algo que haga falta, pero no podemos pagar una tarifa fija porque lo que hacemos nos alcanza para medio comer y hay días que no trabajamos porque no conseguimos la materia prima para hacer la comida».
Los trabajadores informales están buscando apoyo de organismos que les garanticen su tranquilidad laboral en el espacio. Alegan que más de 70 por ciento de los vendedores tiene toda su vida dedicada a los negocios y primera vez que pasan por una situación así.
«La directiva del hospital nos dice que tenemos que apoyarlos porque si viene el Gobernador a inspeccionar la cuota mensual quedaría más alta». Esa es la razón que de acuerdo con García, dio la dirección.
La junta directiva del hospital les planteó el pago de tres mil bolívares semanales a cada uno de los negocios. Los trabajadores aunque están conscientes de que la moneda está devaluada, señalaron que de llegar a cancelar la cuota que les exigieron, nadie les garantice que el dinero sea utilizado para el beneficio del hospital.
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