Roland Garros echó hoy a andar bajo el cielo nublado de un París que amaneció lluvioso y que apenas dio treguas para que el Grand Slam de tierra batida disputara completos 9 de los 32 partidos previstos para el día.
A la espera de la entrada en juego de los principales favoritos, en el cuadro masculino, la jornada dominical de arranque preveía el partido del japonés Kei Nishikori contra el italiano Simone Bolelli como principal atractivo, pero el quinto cabeza de serie, programado en el segundo turno, no tuvo tiempo de acabarlo.
EFE