Puerto Rico se adentró hoy oficialmente en la lista de los países y territorios que han decidido dejar de devolver el dinero que tomaron prestado de los mercados internacionales para financiar su crecimiento.
Su gobernador Alejandro García Padilla, que incluso abandonó sus aspiraciones a la reelección para centrarse en solucionar la crisis fiscal que sufre la isla, anunció hoy su decisión de aplicar una moratoria unilateral en el pago de los 422 millones de dólares que este domingo debía abonar a los titulares de deuda del Banco Gubernamental de Fomento (BGF), el brazo financiero del Ejecutivo.
EFE