Durante los últimos años se han seguido acumulando pruebas sobre las ventajas sanitarias de la lactancia materna, sobre las hoy existen numerosas recomendaciones. La OMS puede afirmar ahora con plena seguridad que la lactancia materna reduce la mortalidad infantil y tiene beneficios sanitarios que llegan hasta la edad adulta.
Un reciente estudio comprueba que este producto natural es fundamental para las primeras semanas del recién nacido. Así lo informó el doctor Elmer Huerta en su participación diaria en el segmento “Cuidando tu salud”, por RPP Noticias.
Huerta comentó que un investigador suizo ha analizado todas las publicaciones científicas que se han realizado en torno a la leche materna y ha compilado los beneficios que aporta este fluido en la salud de los niños recién nacidos.
A continuación te presentamos cinco razonas por las cuales deberías priorizar la leche materna en la dieta de los recién nacidos.
1) Durante las tres primeras semanas, la leche materna es esencial para fortalecer la salud del neonato. Se ha analizado esta secreción materna y se ha concluido que la leche durante esta etapa es muy espesa, debido a que contiene una gran cantidad de elementos. Durante esta etapa, la leche recibe el nombre de Calostro.
2) El Calostro inicia la población del intestino del bebé con la macrobiota, antes conocida como flora intestinal. “Esa población de microbios protege al niño de una serie de enfermedades producidas en las primeras 3 a 4 semanas de vida”, indicó Huerta.
3) Asimismo, el Calostro funciona como una especia de súper vacuna, ya que administra una cantidad gigantesca de anticuerpos al recién nacido. “Esos anticuerpos son todos los que la madre tiene en su memoria inmunológica, los que ha ido adquiriendo a lo largo de su vida”, añadió el galeno.
4) En este sentido, Huerta dio la razón a la Organización Mundial de la Salud, institución que recomendó el consumo de leche materna durante 6 meses o 1 año. “En países pobres donde no hay agua potable esa leche materna puede salvarle la vida al niño”.
5) Luego de 2 o 3 meses, la leche se vuelve más aguada. En esta etapa la secreción contiene menos cantidad de microbios y anticuerpos, pero más azúcares.
6) Estos 500 tipos de azúcares existen para adaptarse al crecimiento del bebé. Esto quiere decir que a medida que el bebé crece, las distintas variedades de azúcares aportan los nutrientes que el niño va necesitando.
DC|I24