El presidente de EE.UU., Barack Obama, insistió hoy en la necesidad de aumentar el control de armas en el país después del tiroteo del pasado domingo en Orlando (Florida), y opinó que no hacer nada después de tragedias así es «inexcusable».
En su mensaje semanal a la nación, transmitido por radio, vídeo y en la página web de la Casa Blanca, Obama renovó su llamado a regular las armas de asalto tras el peor tiroteo de la historia del país, que dejó 50 muertos -incluido el atacante- y 53 heridos el pasado domingo en una discoteca gay de Orlando.
EFE