Con varias películas en producción como “Snowden”, dirigido por Oliver Stone, y tras su éxito como protagonista en “The longest ride”, su progresión va en aumento. Con el apellido a cuestas, Scott Eastwood está dispuesto a llegar a la cima de Hollywood a base de juventud, trabajo, tesón y talento.
En la cresta de la ola, Eastwood muestra al mundo una imagen de un chico que se ha labrado paso a paso su carrera, con un físico espectacular y un recorrido artístico en progresión, que lo pueden convertir en un nuevo icono de la industria de Hollywood y del mundo publicitario.
Su nombre real es Scott Reeves Clinton y es el cuarto de los ocho hijos del director y actor Clint Eastwood, y el mayor de dos hermanos de la asistente de vuelo Jacelyn Ann Reeves, con quien el ahora octogenario director mantuvo un romance de larga duración.
Criado en Hawái junto a su madre, antes de convertirse en lo que es hoy, trabajó en la construcción y en empleos como camarero o aparcacoches. Además, al principio de su carrera, utilizó el apellido de su madre.
Según los biógrafos de esta leyenda viva de Hollywood, siempre fue un gran mujeriego a quien se le han conocido romances con muchas actrices y mujeres relacionadas directamente con la industria cinematográfica, como Catherine Deneuve, Jill Banner, Jamie Rose o Jean Seberg.
Tanto Scott como Kathryn fueron conocidos públicamente como hijos del cineasta en el año 2002.
A partir de 2009 ya introdujo en su currículo el apellido Eastwood, aunque ha reconocido reconocido en varias entrevistas que no le ha venido el trabajo de forma fácil, y en “People” argumentaba: “Para ser honesto, a mi padre nunca le ha importado si yo era fontanero o si era actor. Solo me dijo que lo que hiciera, lo hiciera bien, y que fuera humilde y trabajara duro”.
Aunque también reconocía en otra ocasión que consideraba a su padre como “mi gran referente”.
Después vendrían otros filmes, entre ellos “Invictus” (2009), junto a Morgan Freeman y Matt Damon; “Trouble with the curve” (2012), en la que su padre participaba en la producción; “Texas Chainsaw 3D” (2013) o “Fury” (2014), hasta que le llegó el éxito con la mencionada “The longest Ride”. Ahora está pendiente también del estreno de “Snowden” bajo la dirección de Oliver Stone.
Además, Scott ha sabido que su físico podría abrirle otras puertas, al margen de su pasión por las tablas, y trabajó como modelo para firmas como Hugo Boss, Abercrombie o para un perfume de Davidoff.
Un hombre de fuerte carácter para quien, según confesaba a la revista “Elle”, su mujer ideal debe ser: “Fuerte como una roca. Alguien con la que pueda construir una familia sólida por la que no me cueste renunciar a nada. Me encantaría tener una única mujer y varios hijos. Por eso es algo que haré con calma. No quiero precipitarme”.
El muestra al mundo la imagen de un chico a quien le gusta la pesca, el surf y el submarinismo y que dispone de un físico espectacular y un recorrido artístico en progresión, que lo pueden convertir en un nuevo icono de la industria de Hollywood y del mundo publicitario.
DC|Vocero sin fronteras