Más de 17 años de centralismo, estatismo, populismo, militarismo, autoritarismo, paternalismo, chavismo y todos los perniciosos ismos que podamos imaginar, son las causales directas del gigantesco proceso de destrucción y corrupción que se han desarrollado en Venezuela, con la devastadora secuela de frustración e indignación, que se ha apoderado del alma de la nación, al punto de estar hoy transitando una explosión social por retazos, que amenaza con generalizarse en toda la geografía nacional.
El reciente anuncio, con las subsiguientes decisiones de Nicolás Maduro de crear los llamados Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) y la inmediata centralización militarizada en Fuerte Tiuna, de los insuficientes alimentos producidos por los escasos productores que aún sobreviven en el País, viene a convertirse en la gota que rebosará el vaso de la crisis de escasez y abastecimiento que azota a Venezuela, porque al entregar el manejo de los pocos alimentos que se producen, en las manos del ya conocido y fracasado Freddy Bernal, este sin temor a dudas, pondrá en marcha una política fascista y genocida contra la ciudadanía, al usar una parte de esos pocos productos para ser entregados a los militantes del partido de gobierno en desmedro de la gran mayoría de la población, que en más del 80% manifiestan rechazo al presidente de la República y por ende al régimen que él dirige y la otra será usada perversamente, como se viene haciendo en los supermercados tomados por los militares, para bachaquear y hacer negocios en beneficio de estos indignos uniformados. En otras palabras, la crisis alimentaria se verá agudizada, por esta Simbiosis Del Horror conformada por civiles y militares enchufados y nombrados por Maduro, para que se apropien de los alimentos del pueblo venezolano.
Ante este nuevo coctel del gobierno, que busca distraer a la ciudadanía en la búsqueda de bienes de primera necesidad, alertamos que en el fondo, el objetivo central es seguir aumentando el control del estado sobre la sociedad y potenciar enormemente la corrupción oficial en la distribución de los alimentos, pero el pueblo está reaccionando de manera decidida; ya son a diario los conflictos originados por esta perversa, premeditada y deliberada decisión, los saqueos se hacen presentes en distintas ciudades del País y el caos amenaza con generalizarse, lo que por lógica desencadenará en la anarquía total, que nos conducirá a lo que hemos advertido en varias ocasiones, una explosión social incontrolable, con saldos de nefastas e impredecibles consecuencias para la Nación. La crisis nacional se hace cada día mayor, está más que demostrada la incapacidad de Maduro y el Chavismo para resolverla, la gente debe organizarse y seguir movilizada, porque sólo de esa manera lograremos doblegar la insensatez de la tiranía y hacer que se cumpla la Constitución con la fecha y el cronograma para la convocatoria del referéndum revocatorio, que le ponga fin a esta desgracia.
“Quienes defienden el derecho a la vida de asesinos, avalan la pena de muerte de ciudadanos inocentes”
DC / Lic. Pedro Segundo Blanco / Ex parlamentario del estado Sucre / petersecond1@hotmail.com / @pedrosegundoABP