Delsa Solórzano: Asciende a 150 la cifra de presos políticos en el país #29Jul

A 150 asciende la cifra de ciudadanos venezolanos detenidos por razones políticas, informó este viernes la diputada Delsa Solórzano, presidenta de la Comisión de Política Interior de la Asamblea Nacional, activista por la defensa de los Derechos Humanos y coordinadora del equipo jurídico de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) que apoya a las víctimas de la represión en el país.

“La lista ascendió a casi 200, pero se ha reducido luego de que fueran liberados 27 presos en Yaracuy, dos en Zulia, cinco en Bolívar y cinco en Monagas”, precisó la parlamentaria al intervenir en el programa radial La Fuerza es la Unión, que conduce el secretario ejecutivo de la Unidad, Jesús Chuo Torrealba.

“Es un tema muy importante, es un tema fundamental. Yo soy hijo de un preso político, yo soy hijo de un exiliado político, y por eso en mi historia personal, en mi historia familiar, este tema de la solidaridad con los presos políticos es fundamental”, expuso Torrealba.

“Yo comparto esa condición. Mi papá estuvo 17 años preso, hasta 1983, y vivió muchos años en el exilio. Eso, como tu bien lo has dicho, más allá del punto de vista político, lo compromete a uno desde el punto de vista humano y personal”, sumó Solórzano.

Al iniciar su intervención, Solórzano dijo lamentar mucho que se reconozca a unos presos y a otros no. “Lo tengo que decir con claridad porque para mí el tema de los presos políticos es muy sensible. Esto lo saben los presos y lo saben sus familiares. Creo que todos los presos merecen el mismo respeto, desde los presos más antiguos, como los funcionarios de la Policía Metropolitana, que están presos desde el año 2002, hasta los presos más nuevos, pero todos son presos políticos. Desde 2002 hemos venido ejerciendo una defensa muy activa de todos los presos políticos, sin excepción alguna y sin distingos de cualquier tipo”.

Indicó que los presos políticos más nuevos cuentan con la “lamentable característica” de que, en su mayoría, son ciudadanos comunes. “Hay un ciudadano en situación de calle que estuvo preso hasta hace unos días en el estado Monagas, cuyo único delito fue manifestar por falta de comida. Evidentemente, que una persona que está presa por pensar distinto, es un preso político. Pero un ciudadano que levanta su voz para pedir comida, y por ello es detenido, también es un preso político”, contó.

También refirió el caso de un ciudadano en el estado Yaracuy que simplemente estaba parado en la puerta de un restaurant y sacó su teléfono para avisar a unos amigos que no salieran de su casa porque había disturbios debido a gente que estaba protestando por la falta de comida. “A ese joven lo fue a buscar la policía a su casa a medianoche, lo sacaron a palo limpio y se lo llevaron preso. Ese también es un preso político”.

Los últimos presos políticos de esa lista son 23 jóvenes de Delta Amacuro, varios de ellos indígenas, sin militancia política alguna, que “fueron lanzados al piso por la Guardia Nacional, amarrados con tirro y trasladados sin ninguna justificación alguna a la cárcel 26 de julio, en Guárico. Ellos todavía están detenidos”, contó.

“Hasta hace unos días nuestra cifra de presos políticos era una cosa exorbitante: había 27 muchachos en Yaracuy, varios de ellos dirigentes de Voluntad Popular, otros de Un Nuevo Tiempo, uno de Alianza Bravo Pueblo, varios de Primero Justicia y otros sin ningún tipo de militancia política. Todos fueron presos por presenciar, por ser testigos, como todo el pueblo lo fue, de una manifestación ciudadana por falta de comida”, prosiguió.

“Incluso una joven madre, con una bebé de tres meses de nacida, a quien le dijeron que habían llegado pañales y salió a comprarlos, fue detenida en medio de la trifulca. Esa pobre bebe pasó más de un mes sin tener quien la amamantara. Esos 27 presos están entre los liberados que tú señalaste hace unos días”, le indicó Solórzano a Torrealba.

“Pero la cifra es mayor. Liberaron a cinco presos políticos en Monagas, unos de VP y otros de PJ; a cinco en el estado Bolívar; liberaron a dos niñas que estaban presas en Zulia, una de 18 y otra de 19 años. Lamentablemente a estas niñas las obligaron a declararse culpables para recibir el beneficio procesal de libertad condicional”, prosiguió Solórzano.

Aseguró que en esa misma situación de libertad condicional “está el resto de los presos políticos que han liberado a lo largo de estos años, incluyendo a la jueza María de Lourdes Afiuni, quien ni siquiera puede escribir en su cuenta en Twitter. Ella está en su casa, pero tiene presa la libertad de opinión”, indicó.

“De tal manera que sí han estado liberando a algunos presos políticos, aunque faltan muchos más. De la cuenta base, sin contar a los de Yaracuy, Monagas y Bolívar, había 134 de los cuales dos – las niñas de Zulia – fueron liberadas. A esta cifra de 132 hay que sumar, y estoy hablando de los presos que hay ahorita, los 23 de Delta Amacuro”.

Presos políticos, tema central de eventual diálogo

Al hacer la introducción del tema, Torrealba reiteró lo dicho por él en la rueda de prensa ofrecida el pasado martes, cuando se presentó ante la opinión pública el Comando de Campaña Unitario, y en la que también estuvieron representantes de los partidos que integran la MUD, entre ellos Henry Ramos, Henry Falcón, Luis Florido, Delsa Solórzano, Juan Carlos Caldera y Enrique Márquez.

“En ese contexto un periodista hizo una pregunta sobre el tema de los presos políticos y la respuesta, tras consultar con los compañeros de la alianza, fue la que es la doctrina de la Unidad en este momento a propósito de este tema de los presos políticos y el diálogo. Aclaré que para la Mesa de la Unidad Democrática el tema de los presos políticos, la libertad de los presos políticos, es principalísimo, fundamental, clave y no solo el de los presos, sino también el de los perseguidos y los exiliados políticos”, señaló Torrealba.

Además del centenar de presos políticos “hay miles de jóvenes venezolanos sometidos a procesos judiciales írritos, una suerte de amenaza, una especie de espada de Damocles que pende sobre su cabeza para que en cualquier momento el gobierno pueda arremeter contra ellos. Y además del tema de los presos y los perseguidos, está el de los exiliados políticos”, prosiguió.

“Todo eso se lo expliqué al periodista y le dije, además, que ese es un tema crucial para abordar en el diálogo, pero que incluso antes del diálogo, como precondición para que el diálogo mismo exista, hemos planteado la necesidad de que todas aquellas personas detenidas por motivos políticos en fecha posterior al 19 de mayo, es decir, a partir del momento de la llegada a Venezuela del señor (José Luis Rodríguez) Zapatero ofreciendo sus oficios como mediador, que todas esas personas tienen que ser liberadas”, precisó.

“Informamos también en ese contexto que esa exigencia ha sido parcialmente cubierta, pues han sido liberadas algunas de esas personas, pero que también protestábamos por el hecho de que no habían sido liberadas de manera completa, absoluta, total, sino que había restricciones, medidas cautelares, obligaciones de presentación, etcétera”.

“Todo eso lo dijimos. Sin embargo, al parecer, ha habido alguna distorsión en el mensaje o alguna gente no ha entendido con claridad qué fue lo que se planteó. Si alguien tenía alguna confusión, creo que queda absolutamente despejada”, comentó.

“Para la MUD – reiteró – el tema de los presos políticos es un tema fundamental y de principios, es el centro de algún eventual proceso de diálogo, si llegara a darse. Eso lo hemos dicho: el tema de la libertad de los presos políticos es esencial; y yo he dicho, en particular, que para que en verdad haya un diálogo sustantivo, útil, nutritivo, en esa mesa tienen que estar sentadas voces muy importantes que hoy están en prisión”, como las de Leopoldo López, la de Manuel Rosales, la de Antonio Ledezma.

DC|UV