El término diarrea, coloquialmente se le conoce como una alteración intestinal. Para efectos de la presente opinión, consideramos el vocablo diarrea mental que consiste en una confusión de ideas o ausencia de lógica en los razonamientos expuestos por el individuo frente a determinadas situaciones adversas. Esta referencia es válida, en alusión a lo que el régimen de Maduro nos tiene acostumbrado en estos últimos meses, donde percibimos un individuo confundido, mostrando un rostro con apariencia de perturbado, preocupado, confuso, observamos en su discurso una incoherencia e incluso expresiones propias de un “guapetón” lleno de infortunios, pero realmente, a lo único que le tiene miedo el ilegítimo de Maduro, es al pueblo en la calle, que le bajen los cerros de Caracas, que le salgan los barrios del centro del país, que se alcen en Oriente, en el Sur, en Occidente y por supuesto aquí en Maracaibo, especialmente en el Oeste de la ciudad que se alboroten para exigir comida, medicina, seguridad, empleo, cambio de rumbo y respeto a sus derechos para un mejor vivir.
Si esto sucede, (estamos cerca de que ocurra, porque para mí el punto de quiebre es Julio), las masas en bloque arrasaran con todo, sin distingo de color político, porque a la final la gente de a pie quiere un cambio total, tienen una alta firmeza democráticas y avanza en la lucha por un nuevo liderazgo digno, formado, decente, valiente y patriota.
En lo personal, estoy claro que seremos la transición, es por ello, que abogo por los más necesitados que son la mayoría del país. Este régimen no le garantiza a los venezolanos que están indignados la comida, medicinas, no respeta la propiedad privada, reprime medios y periodista. Además, no proteje nuestras vidas, ni bienes, por el contrario, nos dejan solos y desamparados frente al hampa. En fin, nos robaron hasta el derecho a ser felices, y el de soñar.
Entonces, ¿que esperamos? Da lo mismo sucumbir de mengua en tu casa que arriesgarlo todo peleando en la calle por un mejor porvenir para nosotros, para nuestros hijos y nietos. Nuestro norte debe ser cambiar a este desgobierno de corruptos apátridas que nos someten por nuestra pasividad, ahora más que nunca, debemos comprender el significado de entrega de la vida por la libertad.
Sr. Maduro, dígales a sus jefes en Cuba que jamás el pueblo venezolano será socialista, entre otras cosas, porque no le da la gana, y porque jamás nos rendiremos ante sus políticas corruptas y fracasadas, las cuales, muy pronto, serán derrotadas. No queremos rectificaciones burdas, ni mucho menos esa mímica mentirosa que ha inventado con lo del dialogo (Léase mi artículo La mentira del diálogo, por Joaquín Chaparro O. (@joaquinchaparro)).
Lo que queremos es que se vaya, porque entendemos que la única forma de mejorar este estado de cosa es cambiar al régimen. En ese sentido, caminaremos para la recuperación de las libertades públicas, la decisión ciudadana está tomada es un camino sin retorno para su desgobierno marcado por la autocracia corrupta.
La lucha persistente en la calle le pondrá punto final a esta tragedia que vivimos los venezolanos, mal llamada socialismo del siglo XXI, no hay otra, porque Maduro encierra toda salida democrática (RR). Nuestro mejor escenario es la calle, donde somos fuertes e invencibles. Por eso, cuando bajen los cerros y salga el pueblo a la calle, el miedo, la diarrea de Maduro y su combo será espantosa. No tienten pueblo
DC / Joaquín Chaparro / Ex Concejal de Maracaibo / @joaquinchaparro