Mañana martes se cumplen 205 años de la realización del Congreso General de Venezuela, efectuado en la casa del conde de San Javier, hoy esquina del Conde de la ciudad de Caracas, cuando los representantes de las provincias de Caracas, Cumaná, Barcelona, Margarita, Mérida, Barinas y Trujillo, luego de acalorados debates que se iniciaron el 2 de marzo y contundentes decisiones, decidieron firmar el acta que proclamaba y declaraba solemnemente la independencia de Venezuela, gesta anunciada por el Diputado Juan Antonio Domínguez Rodríguez Presidente del citado Congreso, quien delegó en el Diputado Juan Germán Roscio y el secretario Francisco Isnardi, la redacción definitiva del documento que marcaba la ruptura con la corona española y daría inicio a la guerra más cruenta y sangrienta que viviera la República declarada libre e independiente, ese histórico y memorable 5 de julio de 1811.
Es importante y yo diría que determinante hacer esta breve referencia histórica, porque los aciagos momentos que vive nuestra Nación, nos obliga a echar mano de estas epopeyas independentistas, para comprender la dimensión del compromiso que tenemos todos los venezolanos, para recuperar esa independencia extraviada durante estos últimos años, gracias a un régimen y un modelo político, que le vendió a nuestro pueblo en 1998 las ideas de Libertad, Democracia e Independencia, pero que a lo largo de 17 años al frente del País, sólo han procurado y logrado montar una hegemonía política, que ha dado al traste con estos sagrados principios e instaurado una mafia cívico militar en el poder, que ha depredado y depauperado las bases éticas, morales, económicas e institucionales de la República y la ha minado de represión y presos políticos, autoritarismo y tiranía y dependencia e injerencia de otros gobiernos y estados en los asuntos que sólo nos competen a los venezolanos.
La hora es menguada, compleja y difícil, pero depende directamente de la conciencia patriótica y libertaria de nuestros conciudadanos y de la responsabilidad directa y concreta de nuestros representantes ya no de 7 de las 10 provincias de la época, sino de los 24 estados de nuestra patria, que elegimos contra todas las adversidades como diputados a la Asamblea Nacional el pasado 6 de diciembre de 2015, para que juntos pueblo y parlamento, emulemos el movimiento libertario y republicano del 5 de julio de 1811 y sigamos avanzando hasta lograr vencer la resistencia brutal y sanguinaria de los herederos de la corona de la corrupción chavista, que con la fuerza de las armas y de la sin razón, sentencian, encarcelan, hieren, reprimen y matan y se niegan a escuchar la voz de un pueblo, que está sorteando todos las piedras puestas en el camino, para lograr una salida pacífica, democrática, electoral y constitucional a esta desgracia que vivimos, porque lo único que está exigiendo a los cuatro vientos es ser escuchados, para con su voto, determinar la ruta y el futuro de la Nación.
“Quienes defienden el derecho a la vida de asesinos, avalan la pena de muerte de ciudadanos inocentes”PSB.
DUELO: mientras escribía mi artículo semanal, me llegó la infausta noticia del fallecimiento de Danny Soto Cortez, hijo de mi querida amiga Iris Cortez, mis palabras de condolencias y solidaridad con ella y toda su familia. Paz A Su Alma.
DC / Lic. Pedro Segundo Blanco / Ex parlamentario del estado Sucre / petersecond1@hotmail.com / @pedrosegundoABP