#1 Rayos UV
Los rayos UV pueden causar cataratas, tumores benignos en la superficie del ojo y fotoqueratitis –que es una quemadura temporal, pero muy dolorosa en la superficie del ojo–. Para una mejor protección, complementa el uso de lentes con una sombrero con alas.
#2 Rayos azules
La exposición a largo plazo a los rayos azules y violetas incrementa los riesgos de degeneración macular, especialmente en aquellos individuos sensibles al sol. Como consecuencia de esta problemática, se pierde agudeza visual y las áreas localizadas en el centro del campo visual se tornan más borrosas.
#3 Comodidad
El empleo de lentes de sol no solo previene enfermedades oculares; también hace que veas con mayor comodidad. En este sentido, evita que el resplandor del sol achine tus ojos y los inunde de lágrimas. Esto resulta, indefectiblemente, en una mayor claridad visual.
#4 Mejor adaptación a la oscuridad
Una exposición prolongada al sol puede interferir en la habilidad ocular de adaptarse a distintas intensidades de luz. Esto es potencialmente problemático dado que, por ejemplo, puede ser la causa de accidentes de tránsito, al dificultar la conducción nocturna.
#5 Prevención de cáncer
El cáncer en los párpados y en la piel que circunda los ojos es mucho más frecuente de lo que te imaginas. Así que no te expongas a desarrollar esta terrible enfermedad. Usa lentes de sol, sin importar la actividad que estés realizando.
DC|iMujer