Todos hemos tenido días malos, en donde parece que no podemos controlar nuestras emociones y todo nos pone tristes o enojadas. Sentirse así de vez en cuando es necesario para saber qué es estar feliz, por lo que no es tan malo después de todo.
Sin embargo, mientras todos estos cambios de humor son completamente normales y naturales, existen veces en las que la sensación de estar rota y triste no se va, y al contrario, parece estar absorbiendo toda tu energía y buena vibra. Pero ¿cómo puedo saber la diferencia entre mal humor a “creo que es tiempo de pedir ayuda”? ¡Aquí te lo decimos!
1. No quieres ver a tus amigos
Cuando algo malo te pasa, generalmente lo primero que hacemos es recurrir a las personas que amamos, y para muchos, la solución es una buena noche con vino en compañía de tus BFF.
Dejar a un lado a tus amigas es señal de que algo va mal. Especialmente cuando los ves y no tienes ganas de estar con ellos. Una de las peores cosas de la depresión es que te deja sola, haciendo que sea 10 veces más difícil salir de ella.
Si es tu caso, trata de salir de esas nubes de soledad y has planes con tus amigas cada vez que puedas. Este será uno de tus apoyos principales.
2. Tus hábitos alimenticios han cambiado
¿Quién no ama comer? Nadie en su sano juicio. Sin embargo, para las personas que viven en depresión, sus cambios de apetito son súper extremos.
Existen 2 maneras comunes en las que tu humor puede afectar tu apetito – no queriendo comer nada, o comer de más para sentirte mejor. Ambas pueden afectar tu salud mental y física de una manera súper seria.
Si es tu caso, debes saber que necesitas hacer el esfuerzo de comer balanceadamente de manera urgente y no tomártelo a la ligera. Si crees que ya está fuera de control, pide ayuda a tu doctor.
3. Te sientes constantemente cansada
Y no, no como todos los lunes cuando suena tu alarma y quieres seguir durmiendo (eso es normal) – si no de una manera casi inevitable, aún cuando has dormido tus 8 horas necesarias.
El cansancio provocado por la depresión ocurre en tu mente y cuerpo. No te puedes concentrar y tus patrones de sueño se han visto alterados. Puede ser que te sientas cansada aún durmiendo, o que te sientas cansada por no poder dormir.
Si es tu caso, haz ejercicio, evita la cafeína y prueba algunas técnicas de relajación. Todo esto podría ayudarte hasta que tus problemas emocionales se arreglen y puedas dormir bien como antes.
4. No te interesa el sexo
El deseo sexual es diferente para todos – unos necesitan tener sexo 2 veces al día, mientras otros están perfectamente felices con hacerlo una vez al mes, y cualquiera de las dos son totalmente aceptables.
Debes de saber qué tipo de deseo sexual tienes y es normal para ti, porque ante cualquier cambio extremo debes de poner atención. Si es tu caso, habla con tu pareja sobre cómo te sientes y no te sientas presionada a hacer cosas que no quieres. Y si quieres hacerlo, tranquila, todo tiene una solución, y seguro tu galán estará más que feliz en ayudarte.
5. No puedes verte en el futuro
Un mal día te hace esperar con ansias el fin de semana o algún plan divertido a mediano y corto plazo. Sin embargo, cuando tienes depresión no esperas a que pase nada que te saque de esa situación.
Si tienes alguno de los síntomas mencionados arriba por una largo periodo de tiempo, y crees que tienes depresión, deber saber que no estás sola y que no es para siempre. Visita a un especialista.
DC|Cosmopolitan