Como «una hipótesis sobre lo que pudo haber pasado 40 años después de los acontecimientos que ocurrieron en Washington D.C. (Estados Unidos) en la película original o en la novela» es presentada por Alfonso Herrera la nueva serie que protagoniza, «El exorcista».
El mexicano que debutó en 2012 pero que se dio a conocer en el continente dos años después gracias al éxito de la novela juvenil «Rebelde», da un paso más en su carrera actoral al interpretar al padre Tomás Ortega en esta serie que se estrenó este viernes y que es la gran apuesta mundial del canal Fox.
La historia 2016 se desarrolla en los suburbios de Chicago y genera conexiones con el filme que, conforme la serie va avanzando, se irán descubriendo.
«Nosotros no tenemos ninguna intención de hacer un ‘remake’ o repetir lo que se hizo, pues al final de cuentas estamos hablando del ‘Santo Grial’ del cine de terror, entonces estamos tratando de darle una continuidad, respetando lo que ya se hizo», aclara Herrera durante una entrevista que realizó aprovechando un receso del rodaje del sexto episodio.
En este «thriller psicológico» el padre Ortega y su colega Marcus Lang (Ben Daniels) abordan el caso de una posesión demoníaca en una familia y se ven confrontados por el verdadero mal. Por su parte, Ángela Rance (Geena Davis), es la madre de la familia que debe luchar contra fuerzas oscuras para salvar la vida de su hija poseída por el demonio.
«Esta serie no sólo habla de exorcizar, de estas entidades, demonios y energías negativas que se encuentran alrededor; también habla de cómo los seres humanos tenemos que exorcizar nuestros propios demonios, que son nuestros miedos, nuestras dudas y creo que ese es el punto de mi personaje Tomás», dice el actor.
Para interpretar a Tomás Ortega el artista mexicano tuvo que «encontrarle el truco al personaje», es decir, «los vicios y las virtudes» para tratar de «plasmarlas de la mejor forma».
DC|EE