El autodenominado Estado Islámico ha ejecutado esta semana a 12 de sus miembros, acusados de traición, por haber abandonado sus puestos en el frente de batalla en el este de Siria, según ha podido saber una fuente del Ministerio del Interior de Irak.
Esta fuente ha asegurado al portal de noticias Iraqi News que los líderes del grupo «decapitaron públicamente a 12 de sus propios miembros» que habían abandonado sus puestos de combate en el frente.
«Fueron ejecutados el martes por la tarde, frente a cientos de personas en Raqqa», ha indicado esta fuente, añadiendo que el tribunal de la ‘sharia’ dirigido por el grupo había apoyado la ejecución. «Describió a los milicianos muertos como ‘traidores’ que se negaron a servir al ‘califato'», ha explicado.
Esta misma semana el grupo ejecutó a cinco personas en la localidad siria de Hatla, en los alrededores de Deir Ezzor, por «esconder armas», según el Observatorio Sirio por los Derechos Humanos.
También en los últimos días el grupo yihadista publicó un vídeo en el que se muestra la ejecución de seis hombres a los que se acusa de ser espías, dos de los cuales son fusilados por menores de edad.
En el vídeo, de 15 minutos de duración y grabado recientemente en la localidad de Mosul, aparecen dos menores, uno de ellos de menos de diez años, fusilando a dos hombres junto a otros cuatro adultos.
TiE