La mascota acompañó a sus dueños hasta la sala de urgencias y no se movió hasta que apareció la chica.
Maya, una perrita Akita Inu de dos años esperó paciente durante cuatro días en la puerta de un hospital de la localidad alicantina de Elda a que saliera su dueña, quien fue intervenida de urgencia por una apendicitis.
La mascota acompañó a sus dueños hasta la sala de urgencias y no se movió hasta que apareció la mujer de 22 años, según cuenta el padre de la ingresada, Manuel Iniesta.
De acuerdo con el hombre, el pasado domingo regresaba a casa en coche junto a su hija y a la perra, luego de unas vacaciones en Granada, pero en algún momento Sandra comenzó a sentirse mal.
Desde que ingresaron a la chica para una operación, Maya permaneció afuera causando la curiosidad del personal médico y numerosos pacientes que le llevaron de comer.
DC | ABC