Con las grandes redes sociales asentadas parece imposible que una nueva compañía pueda abrirse un hueco en un mercado saturado. Una idea preconcebida que Snapchat -que se cambiará el nombre a Snap Inc- se ha encargado de tirar por tierra en los últimos meses.
El auge de esta red social, que une su contenido a la volatilidad propia del siglo XXI, ha permitido especular con una inminente salida a Bolsa. E incluso ya puede mirar a los ojos a Twitter, ya que posee un mayor volumen de seguidores activos que la red de microblogging debido a los usuarios más jóvenes. Todo esto sin el apoyo de ningún gigante tecnológico, ya que se mantiene independiente y ha rechazado más de una oferta de Google y Facebook.
Para poner la guinda a este 2016, Snapchat ha anunciado que lanzará, previsiblemente en otoño, unas gafas de sol con las que captar la realidad que se llamarán Spectacles. Éstas costarían unos 130 dólares, tendrían con una doble cámara, una luz para avisar de la grabación y un ángulo de grabación de 115 grados con capacidad de grabación de hasta 30 segundos. Se podrán encontrar en tres colores -negro, verde y rosa- y serán una edición limitada. Si gustan, en 2017 el mercado acogería una segunda tanda.
La compañía subió un vídeo YouTube en el que aparecían las gafas. En él se ve que para grabar hay que tocar la esquina superior izquierda. Se podrá conectar al móvil con Bluetooth o Wifi. Para cargarlas se necesita la caja de las mismas, y se supone que durarán un día entero sin volver a enchufarlas.
Esta es su propia versión de las Google Glass, aunque el precio es más económico -estas rondaban los 1.500 dólares- y sus funciones son más limitadas: solo permitirán hacer lo mismo que hasta ahora se hacía con el móvil, pero con unas gafas. Evan Spiegel, fundador de la red social, asegura que «Se trata de imaginar cómo integrarnos en las vidas de las personas y ver si les gusta».
La realidad cambia gracias a las redes sociales
Snapchat parece dispuesta a seguir creciendo y el primer paso es empezar a desarrollar su propio hardware. Dar el salto del móvil a otro tipo de dispositivos permite, además de obtener más ingresos, cambiar la lente con la que se ve el mundo. Algo que ya se hacen -o intentan- Google Glass o Oculus, propiedad de Facebook, que se dedica a generar tecnología de realidad virtual.
Este mismo año se vio como la creación de un contenido de realidad aumentada, como era Pokémon Go, desataba la histeria entre los jóvenes y no tan jóvenes. También Pokémon Go sacó al mercado su propio wearable. Y es lo que intenta Snapchat, que los usuarios capten la realidad a través de sus teléfonos y la transformen utilizando filtros, efectos, ralentizando o acelerando las imágenes y ahora grabando a la altura de sus ojos.
DC|LI