Una sonrisa bonita es un elemento clave para dar armonía al rostro y mostrar nuestro lado más amable.
Unos dientes alineados y nivelados, un bonito arco de la sonrisa, unas proporciones y tamaños dentarios correctos, así como unos dientes blancos que reflejen un brillo natural, son definitivamente los ingredientes básicos para una sonrisa perfecta, según lo determinan los odontólogos de la Asociación Española de Especialistas en Ortodoncia (AESOR).
Una buena sonrisa potencia la autoestima
El presidente de esta asociación, el doctor Juan Carlos Pérez Varela, no duda en afirmar el poder que tiene la sonrisa como potenciador de la autoestima y la ortodoncia como especialidad clave en la consecución de una buena salud bucodental.
La boca es fuente de salud pero, según los ortodoncistas, es el primer eslabón de una cadena de enfermedades que podrían evitarse incrementando el grado de concienciación sobre la importancia de la salud bucal.
“La corrección previene problemas como migrañas, problemas auditivos, gástricos, complicaciones respiratorias. El ensanchamiento del maxilar superior mediante el tratamiento de ortodoncia, amplía el canal respiratorio, evita la respiración bucal y, con ella, la aparición de enfermedades en oídos, nariz y garganta”, asegura Pérez Varela.
Prevención temprana
El mal alineamiento y encaje de los dientes llega a originar problemas en la mordida, las encías, la articulación temporomandibular, el desarrollo del habla, la deglución o el aspecto facial.
Por estos motivos, Pérez Varela recomienda la prevención temprana en niños además de cepillarse los dientes tres veces al día, algo “básico para conseguir una perfecta higiene bucal». Además, en galeno indica que debe reemplazarse el cepillo cada 3 meses o antes, sobre todo si vemos que las cerdas están dobladas.
Según la especialista el hilo dental es un elemento útil para eliminar la placa que se acumula entre los dientes, donde el cepillo no alcanza, y complementarlo con un colutorio para el enjuague bucal.
Alimentos saludables
Los alimentos tienen una gran influencia sobre la salud dental, por lo que recomienda consumir zanahorias, manzanas o apio, ya que estos contienen una cantidad de agua lo suficientemente alta como para estimular las glándulas salivares y diluir los azucares. “Los cítricos contienen vitamina C, que funciona como ‘antibacteriano”.
Otra de las frutas que pueden ayudar a aclarar el blanco de los dientes son las fresas, ya que son portadoras de ácido málico, un potente agente blanqueador.
El abuso de bebidas como el café y el té pueden afectar al esmalte dental y oscurecerlo. Además, «hay que evitar la ingesta de alcohol y tabaco, que no favorecen una sonrisa bonita, al manchar el esmalte», asegura el especialista.
La doctora Córdoba del Pozo asegura que los alimentos influyen en los dientes hasta el punto de que “las frutas deshidratadas favorecen la aparición de caries”.
Xilitol y calcio
Entre sus recomendaciones alimenticias indica que siempre es bueno tener a mano un chicle sin azúcar tras las comidas, pues “contribuye a eliminar las bacterias acumuladas. El xilitol, componente esencial de los chicles de este tipo, posee probadas propiedades anticaries”, y explica que invierte los efectos destructivos del azúcar en la salud oral: «no es fermentable, y por tanto no puede ser convertido a ácidos por las bacterias de la boca».
Las verduras de hojas verdes “requieren mucha masticación, lo que estimula la secreción de saliva, rica en compuestos antibacterianos”, comenta la doctora.
El agua ayuda a arrastrar y eliminar los restos de azúcar, bacterias y otras sustancias agresivas para la dentadura, indica la especialista mientra que la leche, es esencial por su alto contenido en calcio, fósforo, vitaminas A, D y B. «El calcio es esencial para unos huesos fuertes, y por lo tanto, también para una dentadura fuerte», añade.
Una sonrisa de diseño
El doctor Jorge Escobar Rivera director médico de la clínica SmyCenter propone, para lucir una bella sonrisa, una innovadora tecnología digital con la que los pacientes pueden ver y experimentar, antes del tratamiento, el resultado final.
«El sistema denominado SmyDesign combina factores como los rasgos de cada persona, forma, color y posición, tanto de dientes como de encías, así como de labios y piel, para que el resultado sea perfecto”, indica el doctor.
Según Escobar, la intención al aplicar una tecnología tan avanzada es que se pueda lucir una sonrisa «deslumbrante evitando el miedo al dentista y la incertidumbre del resultado del tratamiento».
«Se trata de una odontología emocional para corregir problemas dentales dejando que la tecnología vaya más allá de un tratamiento innovador», concluye.
EFE