Cipriana Ramos, presidenta del Consejo Nacional del Comercio y los Servicios (Consecomercio), aseguró que la venta de productos importados a precios internacionales violenta el Estado de derecho de los venezolanos.
Se preguntó dónde quedó la Ley de Precios Justos y a quién está dirigida. Criticó que estos rubros sean expendidos a costos que la mayoría de la gente no puede adquirir.
«El deber ser es que se tenga la libertad para ir a cualquier establecimiento y para eso se requiere libertad económica. La harina que llega en las bolsas del CLAP cuestan 890 bolívares, la mantequilla es de 1.500 y el azúcar de 1.400».
A principios de octubre, José Gregorio Vielma Mora, gobernador de Táchira, anunció el abastecimiento de supermercados de Caracas con productos importados. Lo mismo hizo Francisco Arias Cárdenas, gobernador de Zulia, a mediados de año. Ramos explicó que el oficialismo está utilizando las fronteras para ingresar mercancías.
Sin embargo cuestionó cuál es el tipo de cambio empleado para la importación: «No se aclara. Vemos arroz en 2.800 y café en 2.500». De acuerdo con el chavismo, la tasa que corresponde a los alimentos es la de 10 bolívares, lo que contrasta con los costos de estos productos traídos del extranjero.
«Lo poco que se importa lo trae el gobierno. Y se está vendiendo a precios internacionales inaccesibles para los venezolanos. Si tienen las divisas por qué no liberan el control cambiario».
DC|EN