Los Gobiernos de Bolivia y Venezuela insistieron en acusar a Estados Unidos de alentar una conspiración para derrocar al presidente venezolano, Nicolás Maduro, pero aseguraron que no permitirán que eso suceda.
La situación que se vive en Venezuela fue abordada en una reunión que tuvieron en la ciudad central de Cochabamba el presidente de Bolivia, Evo Morales; y la canciller venezolana, Delcy Rodríguez.
En una declaración a los medios, Rodríguez explicó que informó a Morales en detalle sobre «cómo el pueblo venezolano es un pueblo que defiende su soberanía, su independencia frente a todas estas pretensiones que desde Washington se diseñan para derrocar al gobierno legítimo y constitucional del presidente Nicolás Maduro».
«Hay planes, como se ha visto y denunciado, de un golpe continuado que pretende el derrocamiento del presidente Nicolás Maduro por distintas vías y desde acá podemos dar la seguridad de que eso no pasará», sostuvo la ministra venezolana.
Morales expresó su respaldo al Gobierno de Maduro, que es su aliado político, ante lo que consideró una «abierta conspiración de Estados Unidos contra la revolución bolivariana de Venezuela».
Según el presidente boliviano, «todo lo que está pasando en Venezuela» apunta a «acabar con la democracia y tal vez viabilizar una intervención norteamericana» en ese país.
Criticó la decisión del Parlamento venezolano, controlado por la oposición, de iniciar un proceso para determinar la responsabilidad de Nicolás Maduro en la «ruptura del hilo constitucional» por la suspensión del proceso de referendo para revocar el mandato presidencial.
Para Morales, la resolución de la Asamblea Nacional de Venezuela «es inconstitucional» y es parte de una «conspiración» para «orientar un golpe de Estado».
También cuestionó la convocatoria de la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) a marchar el próximo 3 de noviembre hacia el Palacio Presidencial porque, a su juicio, «esa es una conspiración, es un golpe».
El mandatario boliviano expresó su apoyo, respeto y solidaridad al Gobierno de Maduro y al chavismo e indicó que hay que enfrentar las conspiraciones que se presentan.
Rodríguez también se refirió al paro de 12 horas convocado por la oposición venezolana y sostuvo que «ha sido derrotado» porque «el pueblo de Venezuela está trabajando normalmente».
«Allá los trabajadores lanzaron una consigna: fábrica abandonada, fábrica tomada. El pueblo de Venezuela está en normalidad, defendiendo su democracia», afirmó Rodríguez.
Las Fuerzas Armadas de Venezuela tomarán el control de las empresas que se sumen a la huelga general de 12 horas que convocó hoy la oposición para el próximo viernes, dijo.
El diputado oficialista Diosdado Cabello, considerado el número dos del chavismo, sostuvo el miércoles que las Fuerzas Armadas intervendrán las compañías que no operen por la huelga y que el presidente Maduro estaba al tanto de esa decisión.
El presidente boliviano también anticipó la posibilidad de que Maduro visite Bolivia el próximo 18 de diciembre para conmemorar, según dijo, el «Día de la Revolución Democrática y Cultural», que recuerda su primer triunfo como candidato presidencial en 2005.
DC | EFE